“¡A los 12 años ni para arquero servía!”. Se sentaba en la banca y jamás jugaba. Pero insistió, y Fernando Lavalle (que en ese entonces era entrenador del Spellman), dijo: “¿Y ahora qué hacemos con este gordito?” Su asistente respondió: “Que haga bala”. Así fue como Fernando Merino (51) se insertó en el mundo del deporte y porque además, recuerda, en los intercolegiales estaban las chicas más lindas de Quito. Pero, su perspectiva dio un giro cuando, a los 17, logró las marcas para representar a Ecuador en los Bolivarianos. La experiencia lo marcó, porque sembró en él la semilla de lo que significa el compromiso real de hacer deporte. Lo siguiente fue ir a California, a una escuela de alto rendimiento en natación donde fue más allá, al tener metas e ir por ellas sin excusas: “Lo que he conseguido ha sido a base de mucha disciplina. Mientras los demás estaban de fiesta o haciendo cualquier otra cosa, yo estaba entrenando o estudiando. En California, comprendí que los objetivos determinan hacia dónde se va. No importa si son altos o pequeños, pero sí conseguirlos”.

Con esa mentalidad Fernando ha participado, entre otras, en algo así como 60 triatlones, un Iron Man y varias medias Iron Man alrededor del mundo. Últimamente, participa en frecuentes carreras de ciclismo de montaña, y aunque se dice a sí mismo “anda suave esta vez”, en mitad de cada carrera, su circuito interno se le prende y ¡no hay quién le pare!

Es también un empresario reconocido en el medio. Desde que acabó su carrera universitaria en México se ha destacado por ser un emprendedor nato. Creó Satnet a los 26, y luego el Grupo MAS junto a su hermano y socio Xavier Merino Burbano, que ha liderado el mercado local y latinoamericano en lo que se refiere a desarrollo de tecnología con plataformas en diversas ramas, como la bancaria, y también en varias divisiones de negocios inmobiliarios que incluyen importantes concesiones.

La diversificación de sus empresas que se expanden a Guayaquil y otras partes de Latinoamérica, son el plus del grupo que dirige junto a su hermano. Sin duda, el desafío lo mueve, como deportista que es. “Cada empresa que he hecho es como una competencia. Necesitas trabajar cada día, levantarte enfocado y lograr que sean rentables; pero cuando empiezo un proyecto pienso si va a sumar o quitarme tiempo para mis prioridades que son mi familia y el deporte”.

La familia, su eje

Casado con Carolina Borja, juntos han logrado el equilibrio perfecto entre familia, empresa y deporte. Él reconoce que, sin el soporte de su esposa, la aventura que supone su vida, sería imposible de llevar a cabo. “Es el eje. Hace que todo esté en orden”.

Tienen dos hijas, Melisa (14) y Sofía (11), quienes han heredado de Fernando la vena por el deporte. Asegura que jamás hubo presión para que así sea, todo lo contrario, las chicas decidieron practicar natación por cuenta propia y han logrado las mejores marcas en provinciales, nacionales, y participado en los Junior Olympics de California, donde Sofía ganó medalla de oro, la única ecuatoriana de su edad que ha ganado ese reconocimiento.

Con metas claras y la acertada guía de sus padres, el futuro que ambas contemplan es seguir siendo deportistas y también profesionales. Los últimos veranos han ido a California, a una escuela de natación y la experiencia ha resultado otra motivación más para seguir avanzando. Son chicas sanas, amigueras, con mentes lúcidas y muy bien formadas. El deporte y la disciplina les ha dado un norte en su vida y, sin duda, avanzan más rápido que cualquiera.

El empresario recalca que realmente lo que tiene trascendencia en su existencia es la verdadera riqueza que supone tener tiempo para su familia y el deporte. Y ahora, su mayor satisfacción es ver y estar con sus hijas compartiendo lo que van logrando en sus vidas.

Al aire libre

Su vida ha sido una suma de experiencias que lo han direccionado hacia los deportes de manera categórica, tanto, que, hoy por hoy, el empresario no concibe empezar su día a día sin nadar o ciclear.

Personal

- Estudios. En el TEC de Monterrey - Ingeniería Industrial y de Sistemas.

- Fundador (junto a su hermano Xavier) del Grupo MAS.

- Es uno de los primeros 5 Iron Man del Ecuador.

- Ha participado en decenas de maratones, siendo campeón en diferentes niveles, ahora en categoría Máster.

- Casado con Carolina Borja.

- Hijas: Melisa, 14, y Sofía de 11, campeonas de natación a nivel provincial y nacional.

“Lo económico es el resultado del esfuerzo, así como las medallas los son del esfuerzo en el deporte, pero no es el fin que me mueve”.