A diferencia de otras provincias, la división de PAIS en Guayas pasó de un asunto interno a las calles. El apoyo o no a la consulta popular planteada por el presidente Moreno es la principal discordia. Parte de la directiva firmó el pasado lunes un manifi

La division de PAIS se riega a Pichincha, Azuay y Manabi

La crispación se esparce. El ambiente que vive el movimiento Alianza PAIS en Guayas no es ajeno a las provincias.

La crispación se esparce. El ambiente que vive el movimiento Alianza PAIS en Guayas no es ajeno a las provincias. Aunque en otras localidades no exponen sus diferencias públicamente, ni hay enfrentamientos verbales entre oficialistas a favor y en contra de la consulta, las dirigencias en cuatro de las cinco provincias (incluido Guayas) que aglutinan el 62,7 % del electorado nacional están igual de divididas entre el sí, el no o guardar silencio.

Azuay vive un escenario similar al de Guayas con su directiva dividida. Juan Cristóbal Lloret, asambleísta y director provincial, tiene sus reparos frente al plebiscito planteado por el presidente Lenín Moreno. No así la subdirectora Mercedes del Rocío Juca, quien está de acuerdo con todas y cada una de las siete preguntas. Según comentó a EXPRESO, con ella concuerdan 15 de los 17 miembros del directorio provincial. No obstante, hay otras figuras pesadas del oficialismo azuayo que comulgan con Lloret como los legisladores Doris Soliz y Esteban Albornoz, y el superintendente de Ordenamiento Territorial, Fernando Cordero, por citar algunos.

Manabí, bastión oficialista que le dio 8 de 9 asambleístas a la bancada verde flex, también está partido. Si bien la directora provincial, Susana Dueñas, parece no discrepar con la subdirectora Lídice Larrea, ninguna ha exteriorizado su postura frente a la consulta. No así los asambleístas oficialistas, Daniel Mendoza, Ricardo Zambrano y otros que están de acuerdo con el proceso que aguarda el dictamen previo de la Corte Constitucional.

En Pichincha, el segundo bastión electoral del país luego de Guayas, el director y prefecto, Gustavo Baroja, apoya públicamente el planteamiento del presidente Lenín Moreno, mientras que la subdirectora Anabel Hermosa guarda silencio. Este Diario intentó ayer hablar con ella, pero su agenda impidió obtener una opinión. No obstante, las voces pichinchanas en contra de la consulta están en la Asamblea. Soledad Buendía es una de ellas, quien presentó un pedido de Amicus Curiae a la Corte.

La provincia de Los Ríos parece ser la única ajena a estas rencillas internas o a los silencios de algunos dirigentes. Tanto el director, Marco Troya, como subdirectora, Marcia Arregui, concuerdan con el sí a la consulta popular.

Estos impasses sacan a relucir un pedido de la militancia: la renovación de las directivas. Todas están prorrogadas desde enero pasado por el último proceso electoral. Ignacio Figueroa, subdirector de PAIS en Guayas, fue el primero en poner el tema sobre la mesa. Su par azuaya acoge el pedido y suma su apoyo a la convocatoria de elecciones internas.