
Danos y riesgos en dos calles del centro
En 10 de Agosto y Malecón se hundió el pavimento, debido a un colector de aguas servidas colapsado. Arriba, una tapa semihundida en la calle Aguirre.
Luego de dejar a un pasajero por la calle Aguirre, apenas pasando la intersección con Boyacá, Leonel Quimí, un taxista que circulaba por el sector, se distrajo un instante mientras conducía. Entonces el fuerte golpe que sintió al caer la llanta delantera del vehículo en un hueco lo volvió a la realidad.
Esa tapa semihundida en plena calzada es uno de los problemas que presenta la circulación por la calle Aguirre desde el malecón Simón Bolívar hasta el malecón del Salado. También representa un peligro para los peatones que a diario transitan por el sitio o cruzan la vía.
A ello se suma el deterioro de la carpeta asfáltica en diversos sectores por efecto de las lluvias. Precisamente, en esa calle el Municipio realiza trabajos de bacheo y reparación.
Jorge Berrezueta, director de Obras Públicas municipales, reiteró que los baches se producen por el agua de las lluvias, que es el principal enemigo del pavimento. Según dijo, para que una vía dure en buen estado se requiere de un buen drenaje como principal condición.
“El tiempo desde la raspada hasta la asfaltada normalmente es de una semana, pero ahora hemos tenido problemas de abastecimiento, se dañaron los dos tanqueros que traían el asfalto de Esmeraldas”, agregó.
Entre las calles Los Ríos y Esmeraldas, el pavimento ‘raspado’ tiene ya varios días, caso similar a lo que ocurre en otros sectores, como en la calle 6 de Marzo al sur de la urbe.
“Estamos por terminar la calle 6 de Marzo que tiene más de 15 días desde que se abrió. Estamos trabajando en eso, le estamos dando prioridad a las avenidas principales”, acotó Berrezueta.
La calidad del asfalto nacional ha mejorado mucho según el funcionario. El tratamiento al petróleo se ha optimizado, ya no hay necesidad de importar asfalto del Perú o de otra parte, manifestó. RMO