Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

Correa despide al mando militar

Remezón. El Alto Mando militar tiene nueva cúpula y, con ello, ocho altos oficiales de las tres ramas de las Fuerzas Armadas entraron en disponibilidad.

“Con mucho dolor he tenido que cesar anticipadamente al Alto Mando. No permitiremos que nadie manipule ni a los soldados ni al país”. Así informó el presidente Rafael Correa en su cuenta de Twitter el cambio de mando. La salida se dio dos y diez meses antes del término de las funciones de la cúpula militar, con la que ha habido roces en los últimos meses.

El vicealmirante Oswaldo Zambrano es el nuevo jefe del Comando Conjunto en reemplazo de Luis Garzón y, con ello la Marina vuelve a comandar al mando militar.

César Merizalde reemplaza al héroe del Cenepa, Raúl Banderas, en la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), quien tendrá su última exposición pública en los actos del 10 de febrero en Manta, por los 21 años del conflicto del Cenepa. Luis Castro, un general de brigada, ocupa el cargo de Carlos Obando, que era un general de División. Ángel Sarzosa sustituye al vicealmirante Luis Santiago, a quien le faltaban diez meses en el cargo.

“Las pensiones militares están garantizadas por el Art. 370 de la Constitución y por el propio Issfa”, aseguró el mandatario en la red social.

Momentos antes, el directorio del Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) había pedido respeto al acuerdo “suscrito voluntariamente por las dos instituciones (Ministerio del Ambiente e Issfa)” por 48 millones de dólares por la venta de los terrenos de lo que hoy es el parque Samanes de Guayaquil.

El vocero fue el general Luis Garzón, exjefe del Comando Conjunto. En su última intervención pública destacó que la compraventa de los terrenos de Samanes tiene plena validez pues “ningún órgano competente ha declarado lo contrario, toda vez que ese contrato no tuvo ni tiene vicio alguno”.

La declaración pública, de dos páginas, fue leída por el oficial en la Sala de Guerra del Comando Conjunto. En ese sitio se dieron cita los comandantes de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), Ejército y Armada, además del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.

El pronunciamiento puso fin a varias horas de reunión en las que se definió una posición sobre la devolución de 41 millones de dólares que debe hacer el Issfa al Ministerio del Ambiente. La disposición de descontar ese monto de los 260 millones que el Ejecutivo debe entregar al Issfa, provino el jueves del presidente Correa, quien quiso poner fin al conflicto por la compraventa de las 220 hectáreas.

Pero antes de ser cesados los miembros de la cúpula ratificaron que Ambiente fue el que propuso el acuerdo al Issfa. La negociación se dio en 2010 y tuvo como base un avalúo efectuado por la Dinac. El monto: 48 millones de dólares.

Expusieron además que el año pasado el procurador solicitó al Issfa y a Ambiente que rectifiquen o modifiquen los actos necesarios y del contrato dentro de la compraventa de los terrenos de Samanes. Pero según la cesada cúpula militar el contrato tiene plena validez. “No podemos estar de acuerdo que se debiten recursos de la Seguridad Social de las FF.AA. porque lo prohíbe de manera expresa la Constitución, en su artículo 372”, dijo Garzón. Agregó que los recursos de la seguridad social militar le pertenecen a los soldados en servicio activo y pasivo y a sus familias. Por ello reiteró que es obligación del Estado su protección y preservación.

La cúpula se fue con la seguridad de que la Contraloría y los órganos competentes, después de efectuar un análisis detallado del proceso, le darán la razón al Issfa. Además no descuidó aclarar que Fuerzas Armadas, por su naturaleza, tradición e historia, son las primeras defensoras de la Constitución y las leyes, así como “los derechos, libertades y garantías de los ciudadanos”.

Los militares en servicio pasivo no actuarán inmediatamente, anunció Jorge Villavicencio de la Confederación Nacional de Militares en Servicio Pasivo y Montepío República del Ecuador. “Con cabeza fría iremos a las provincias donde los compañeros”, anunció. La próxima semana habrá una reunión en Machala para hablar del tema.

El coronel Mario Pazmiño, exjefe de Inteligencia del Ejército, reiteró que al actual mando le corresponde decidir si respalda o no el pronunciamiento de sus predecesores. Los pasivos se autoconvocarán en reuniones durante este feriado y la próxima semana, anunció. MCV/RTG

Servicio pasivo

Los que se fueron de las Fuerzas Armadas

Con tres decretos, el presidente Rafael Correa cambió ayer a los cuatro miembros de la cúpula militar, a los que el día anterior había llamado “subalternos”.

Con el primer decreto cesó en sus funciones al jefe del Comando Conjunto y a los tres comandantes de fuerza, pero con ello también dejó fuera al general Edwin Freire, que tenía mayor antigüedad que el vicealmirante Luis Santiago. Es decir, cinco oficiales entraron al proceso de disponibilidad, al servicio pasivo.

Con un segundo decreto, el presidente nombró al nuevo jefe del Comando Conjunto. Escogió a Ángel Sarzosa, el primero de la terna en la que estaban otro marino y el oficial de mayor antigüedad de la FAE, César Ramos.

Con un tercer decreto, en el que nombra a los comandantes de Fuerza de las ternas presentadas, el presidente Rafael Correa deja intacta a la oficialidad de la Marina, pero recorta a un teniente general (Ramos,) en la FAE, y a los dos últimos generales de división del Ejército: Javier Albuja y Fernando Drouet.

En total, son ocho altos oficiales que desde ayer entraron a formar parte del servicio pasivo de las Fuerzas Armadas: 5 del Ejército, 2 de la Fuerza Aérea y uno de la Marina.