La confianza empresarial sigue a la baja
Las expectativas de los empresarios tienen una relación directa con la economía.
Cuando el ICE (Índice de Confianza Empresarial) sube, entonces crecen las inversiones, lo que significa que se ampliará la producción o el Producto Interno Bruto (PIB) de un país. Por eso, en países como Estados Unidos, se sigue muy de cerca el camino que trace ese indicador.
En este país, el ICE ha venido cursando un ritmo con altibajos en los cuatro sectores en los que se toma como referencia: construcción, comercio, industria y servicios. En febrero pasado, el ICE global se ubicó en 1.151,1 puntos, mientras que en enero fue un poco mayor: 1.155,7; una disminución de 4,6 puntos.
Por su parte, el ICC (Índice de Confianza del Consumidor) es otro predictor. Es que cuando el consumidor está optimista en el futuro económico, tiende a subir su nivel de gasto y eso se traduce en ventas para las empresas. Los dos sectores significan, al menos, cerca del 75 % del PIB de este país. WMA
