
En busca del sendero perdido de la isla Santay
El camino de 8 kilómetros es parte del proyecto inicial. La obra ha quedado a medio terminar.
A casi menos de 500 metros del puente peatonal que une a Santay con Durán, se encuentra lo que los colonos y guardaparques de la isla identifican como el terraplén.
No está señalizado y aunque se abre a un costado de la caminería de estructura de aluminio y madera plástica, el acceso está cortado por el cerco que forma la barandilla lateral. “No hay acceso. Es solo para los recorridos de guardianía. También lo usan los estudiantes de las universidades que ejecutan estudios en la isla”, dice uno de los guardaparques.
Sin embargo, el mencionado terraplén es lo que en el proyecto original, que comenzó a ejecutarse en el 2014, se denominó sendero pedestre. En la descripción técnica se identifica como tramo 2. El tramo 1 es la caminería elevada que se construyó con madera plástica china, que actualmente presenta problemas por el desgaste del material.
En el caso del tramo 2, se diseñó como sendero empedrado, que se abre paso por el ala este de la isla y serviría para recorridos en bicicleta. En la propuesta de diseño se la calculó en 10.143 metros de largo (algo más de 10 kilómetros).
El trazo, que se observa desde Google Maps, parte cerca del puente de Durán y cubre un tramo de siete kilómetros. Debía terminar en un punto intermedio entre el puente peatonal de la calle El Oro y la Ecoaldea. Se queda un kilómetro antes.
“Hasta ahí se lo construyó. Actualmente, es un sendero que se pierde entre los matorrales. Comúnmente, los guardaparques deben meterse a desbrozar el camino”, agregó otro habitante de Santay.
Sobre las razones por las que la obra quedó inconclusa, el Servicio de Contratación de Obras (Secob) aclara que el contrato inicial contemplaba únicamente la construcción de un puente que cruzaba hacia la isla Santay. Luego se realizó un rediseño de unificación de los puentes, mediante un sendero elevado que conectaba ambos puentes con la Ecoaldea. “Este rediseño originalmente contemplaba algunas estaciones con baños y parqueaderos de bicicletas, pero por temas de presupuesto, en el sector más alto de la isla se cambió el diseño a terraplén, debido a que el costo de este difiere 2 a 1 con el sendero elevado”.
Sin embargo, “solo se terminó de construir el sendero elevado de 6 km y los 8 km de terraplén quedaron inconclusos”.
Esa es la versión oficial, aunque en la isla se asegura que el trabajo no pudo ser finalizado “por problemas técnicos”. Hay quienes aseguran que se consideró que el cerco de material pétreo no era adecuado para la isla, con un alto porcentaje de zonas inundables. No se pudo precisar la inversión que se hizo en la construcción de esta obra. Hubo traslado de grandes cantidades de material pétreo. El sendero tiene un ancho de cuatro metros.
En su momento Emiliano Sornoza, uno de los voceros técnicos del Secob, anunció que se tenía prevista la instalación de 20 alcantarillas distribuidas a lo largo del camino rústico, tomando en cuenta el ingreso de las aguas del río hacia el humedal.
José Delgado Mendoza, quien en el 2010 fundó el sitio web ‘Los Amigos de Santay’, hoy con más de 40 miembros, asegura que le resulta increíble que se haya iniciado una obra de ese tipo y que se la haya suspendido por problemas técnicos. “Esos se definen en la planificación, no en la ejecución”, dice.
Este activista considera que sería recomendable la ejecución de una auditoría, pero en todo el proyecto de Santay.
Hay cosas que resultan inconcebibles, agrega Delgado, quien recuerda el tema de la planta potabilizadora de agua que se entregó en el 2012 y que funcionó medio año. “De qué le sirve a las familias de Santay tener grifo, si no hay servicio”. Algo similar sucede con el mencionado sendero. Está ahí, pero pocos saben para qué.
Los detalles
El proyecto
Guayaquil Ecológico inició en 2010, con parque Samanes (860,12 hectáreas), dos puentes, una Ecoaldea y caminerías en Santay, la recuperación del Salado.
La isla
Ocupa 2.214 ha. La habitan 57 familias (229 personas). Es considerada humedal de importancia internacional y ha sido incorporada al Sistema Nacional de Áreas Protegidas.