Los aviones Arava no tienen caja negra, afirma experto en seguridad
No habrá, al parecer, caja negra para analizar el avión Arava T-201, matrícula AEE-206 y de fabricación israelí que se accidentó el martes en Fátima, Pastaza.
El siniestro cobró la vida de 22 militares, entre oficiales y tropa, de las tres ramas de las Fuerzas Armadas.
“Los aviones Arava no tienen cajas negras, son muy chiquitos”, explicó a EXPRESO, Daniel Adler, argentino experto en seguridad y excomando del ejército de Israel.
Disponen, añadió, de un Transmisor de Localización de Emergencia (ELT por sus siglas en inglés). Adler dice también que llevan micrófonos ambientales y la información se transmite a la torre de control.
Si existe algún dato, indicó, seguramente estará en la torre de control del aeropuerto de Shell, en Pastaza. Establecer qué provocó el accidente del avión que –según la Secretaría de Comunicación, operó 24 años en la Brigada de Aviación del Ejército–, está en manos de la Junta Investigadora de Accidentes (JIA), que se conformó de inmediato.
La Fuerza Aérea y la Armada son parte. Según el reglamento, emitido en 2009 por el presidente Rafael Correa, la JIA debe investigar y establecer los hechos, circunstancias, causa o probable causa de un accidente o incidente grave. Además, identificará evidentes deficiencias de seguridad y formulará recomendaciones para eliminarlas o reducirlas.
La JIA tendrá acceso sin restricciones a los restos de aeronaves y material, incluyendo registradores de vuelo y voz. Ayer, EXPRESO buscó en el Ministerio de Defensa los nombres de los miembros de la Junta Investigadora pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta. MCV