Editorial | Ecuador no puede volver a paralizarse
Es urgente que el Gobierno presente de manera transparente y detallada cuál es el Plan B si las proyecciones actuales falla
Ecuador se encuentra nuevamente en una ‘pendiente de riesgo’. Si bien las autoridades han anunciado que el estiaje de este año no alcanzará la severidad del anterior, la realidad es que el país aún enfrenta un déficit energético sin resolver que mantiene latente la amenaza de apagones. La falta de incorporación total de los megavatios prometidos tras los contratos fallidos, en medio de mayor demanda energética, configura un escenario que exige respuestas inmediatas y contundentes del Gobierno.
La preocupación central no radica únicamente en la posibilidad de cortes eléctricos, sino en la ausencia de un plan integral que garantice la continuidad de las actividades productivas, educativas y hospitalarias. Ecuador no puede permitirse otra paralización como la vivida en meses anteriores, cuando sectores enteros de la economía se vieron severamente afectados por apagones de hasta 16 horas.
Es urgente que el Gobierno presente de manera transparente y detallada cuál es el Plan B si las proyecciones actuales fallan. Los ecuatorianos merecen conocer qué medidas específicas se implementarán para proteger los sectores críticos, cómo se priorizará el suministro eléctrico y qué alternativas energéticas se activarán en caso de emergencia.