Sin cambios ante el cambio

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Sin cambios ante el cambio

"...las alcaldías tendrían que asumir que la lucha contra el cambio climático está comprendida entre sus competencias, pues afecta directamente al bienestar de la población"

El cambio climático es una realidad innegable. Pese a ello los gobiernos de las naciones más contaminantes del planeta no se han comprometido en la COP26, a través de normas obligatorias, a disminuir aceleradamente y en la medida que el calentamiento global lo amerita, las emisiones de carbono. Ante esta realidad, cada país y comunidad debe contribuir con sus reducciones por cuenta propia. En las ciudades ecuatorianas, por ejemplo, las alcaldías tendrían que asumir que la lucha contra el cambio climático está comprendida entre sus competencias, pues afecta directamente al bienestar de la población. Deberían, en forma inmediata, emprender acciones concretas para contrarrestar sus efectos, destinando recursos a la puesta en marcha de mecanismos que detengan el deterioro del entorno.

Ciudades como Estocolmo, Colonia y Barcelona están implementando políticas que abarcan la regeneración de distritos ciudadanos, convirtiéndolos en zonas de bajo consumo de energía y con áreas verdes (paneles solares, arborización, etc.); la integración de estructuras e instalaciones para la provisión de servicios básicos de forma más eficiente y con una menor huella de carbono, como la gestión de residuos y generación energética coordinada; y el desarrollo de sistemas sostenibles de movilidad urbana.