Estado totalitario, libertad y política

Los columnistas explicamos hechos para que se comprendan, sin creernos poseedores de la verdad
El correísmo y amigos odian la prensa y el pensamiento libre porque pueden hacer conocer sus acciones corruptas y el saqueo como pasó entre 2007-2017. Así alimentan su deseo-placer sensual y sexual totalitario y de control estatal de sociedad y ciudadanía. Ellos persiguieron columnistas, caricaturistas. Diarios y revistas sufrieron los efectos de esa patológica política. Hoy retornan con una nueva versión de ley mordaza. Tiene 20-25 artículos para perseguirsancionar a periódicos, periodistas y ciudadanos que opinan. Dan a la Defensoría del Pueblo funciones inconstitucionales. La hacen otra Supercom para amenazar-penalizar, en lo civil y penal. "Se le asigna un rol de ejecutor de una política de control e intervención en los medios de comunicación y en el trabajo de los periodistas del país. En general, crea un régimen de sanciones, lo cual ya había sido desechado con las reformas del 2018" (C. Ricaurte). Buscan someter a la prensa libre y controlar-sancionar la opinión crítica que investiga a los políticos que pueden saquear y llevarse al país en peso. Ejemplos sobran.
Hace del Estado un creador-vigilante de la verdad, pensamiento y razón única. Dicen: "El Estado debe garantizar el derecho a la verdad de todos los ecuatorianos, queda prohibida la difusión de toda información falsa" (Art. 17), rebasando toda acción comunicativa y la libertad de intercambiar mensajes entre ciudadanos. En una sociedad democrática y mundo científico, con racionalidad crítica sabemos que la verdad es un proceso construido por consenso y disenso. Con esta ley, Einstein no podría formular su teoría relativista.
La prensa media entre hechos y ciudadanía. Es el instrumento idóneo para conocer lo que realmente hacen: políticos, instituciones y gobernantes. Los columnistas explicamos hechos para que se comprendan, sin creernos poseedores de la verdad. La prensa retrata la historia cotidiana de la sociedad y los hombres.
Expreso y yo fuimos enjuiciados con la ley mordaza correísta. Por eso sabemos de qué son capaces. Actualmente dos ejemplos de vida de defensa de la libertad de pensamiento: Galo Martínez Merchán y Pancho Huerta Montalvo nos legaron con su ejemplo su protección. La ley es neomordaza con disposiciones siniestras y perversas.