Columnas

Voto rechazo

"El CNE esta actuando como guardia de choque"

Está claro que el CNE no actúa de manera objetiva y justa en el manejo de las inscripciones de los candidatos a la presidencia de la República.

Este organismo está siguiendo el libreto escrito por quienes representan a partidos políticos que quieren tener el escenario electoral para ellos solos, impidiendo que candidatos con fuerte opción electoral participen en el proceso.

Debe ser tan débil la candidatura del preferido, que la defienden como pueden, sin ni siquiera guardar las apariencias. Van talando cualquier árbol que le pueda hacer sombra al susodicho.

El problema de tomar este tipo de medidas restrictivas y antidemocráticas es que puede originar una reacción de aversión en buena parte del electorado, que es testigo de cómo el personaje de su preferencia es impedido de participar con decisiones sospechosas y sin el amparo de la ley.

Este voto rechazo se irá por la opción que más se acerque a la que ellos buscaban, evitando a toda costa votar por el candidato que representa a las fuerzas dictatoriales que descartaron a su favorito.

Si el CNE continúa con su absurda posición dictadorzuela, catapultarán una buena tajada de las voluntades electorales hacia el voto por aversión.

La calentura no está en las sábanas, el principal problema es que el candidato preferido del organismo electoral no es ni chicha ni limonada, sus expresiones lo lastiman, entre esas la más reciente, que la reprocho por ser machista, en las que se atreve a discriminar a la mujer cuando afirma que una “chica tiene que arreglarse bonito, y cuando esté bien vestida y bonita consigue novio”. Esto sin duda ha generado el rechazo de muchas mujeres, que no admitimos este tipo de violencia verbal en la política.

El CNE esta actuando como guardia de choque. Su pretoriana actitud, de aspirar a ser la oscura fuerza detrás de la ultra derecha del país, y eliminar de la competencia a cuanto candidato le haga sombra a su favorito, solo generará el sonoro rechazo de los electores, quienes al final votarán por cualquiera menos por el ahijado del organismo electoral.