La reciprocidad y el agradecimiento

Está comprobado que ser agradecidos reporta tantos beneficios físicos, mentales, y emocionales que todos deberíamos tener esta buena costumbre.

En este Año Nuevo 2020 agradezcamos a Dios por todos las bendiciones que ha brindado en especial la perseverancia, constancia, paciencia y fe a todas las personas que tienen a su cuidado algún familiar con la enfermedad del olvido llamado “Alzheimer”, demostrando su reciprocidad y agradecimientos por lo que ellos hicieron por nosotros.

Cuando damos alegría de corazón a alguien que nos hizo un regalo, unas palabras amables, las bendiciones llegan por triplicado, agradezco a esa persona que siempre estuvo en todos los momentos, buenos y malos, y que Dios lo está observando por ser un ejemplo de gratitud de los que ya no existen. Practiquemos el dar, y se les dará.

El que ofrece acción de gracias como su sacrificio; se glorifica. Cuando agradecemos a Dios, se nos multiplica las bendiciones, el tiempo de Dios es perfecto.

¡Feliz y bendecido Año Nuevo 2020! hoy y siempre, estando constantemente agradecidos con Dios, nuestro refugio espiritual.

Javier Valarezo Serrano