Gloria al Primero de Mayo

El Primero de Mayo debe ser de triste recuerdo. El Día Internacional de los Trabajadores o Día del Trabajo se celebra el primero de mayo para conmemorar a nivel mundial al movimiento obrero y a la fuerza laboral como movimiento reivindicativo de diferentes causas relacionadas con el trabajo. Ese día marchan los trabajadores exigiendo reivindicaciones para el fortalecimiento de la clase obrera y se rinde honores a los Mártires de Chicago, que en 1886 fueron condenados a muerte por participar en la huelga general que originó la revuelta de Haymarket. La premisa de la protesta era reducir la jornada laboral a ocho horas diarias, con un día de descanso. Hace poco más de 136 años, en las fábricas trabajaban por igual hombres, mujeres, ancianos y niños, con jornadas de más de 12 horas diarias, lo que no daba opción a las personas de recuperarse, descansar ni disfrutar de tiempo de ocio. Tuvieron que luchar por años para conseguir establecer la jornada laboral de ocho horas, incluso a costa de sus propias vidas. Actualmente, el Día de los Trabajadores es una efemérides festiva, pero no hay que olvidar que rinde homenaje a quienes lucharon por una vida digna para todos los trabajadores. Debemos recordar que el trabajador tiene derecho a una mejor condición de vida, a un sueldo digno, que se promuevan leyes justas que no perjudiquen las conquistas laborales. Apoyemos su noble causa: todo lo que consumimos viene de su esfuerzo laboral que nos permite vivir mejor y que promueve el desarrollo de la economía productiva.

Ricardo Ordóñez