Destitución de jueces cortesanos

El Ejecutivo tiene protección constitucional para hacer sentir su autoridad sin ser autoritario

Los jueces que condenaron a Correa cumplieron su papel, pero en la demora para extraditarlo hay poderosas decisiones implementadas por el expresidente para no ser arrestado. Por otro lado, un juez de garantías penitenciarias libera a Glas y otros sin petición y de oficio. Son demostraciones del poder del dinero ejercido por quien se favorece con el crimen. Es urgente aclarar los motivos para la tardanza en la extradición de Correa y el Consejo de la Judicatura debe ser más ágil y serio en la depuración de los juzgadores de bolsillo y de pacotilla que abundan; si no lo hace pende la sospecha de ser involucrado en actos de corrupción institucionalizada. Fuera del país, la corrupción doctrinal se alimenta con las ideas de Zaffaroni, antes eximio tratadista penal, hoy defensor del abolicionismo penal, quien públicamente se pronuncia a favor de las fechorías de Correa y su gente. Si la corrupción está institucionalizada y es causa principal de llevar a Ecuador a ser estado fallido, ¿cuándo empezarán el castigo y aprobación de un sistema orgánico de justicia que desmonte el aparataje correísta armado para garantizar impunidad? El Ejecutivo tiene protección constitucional para hacer sentir su autoridad sin ser autoritario, usando un documento correísta que contiene mecanismos para deshacer lo mal hecho. Él es demasiado tolerante y complaciente con este sistema podrido por el cáncer de la corrupción. ¿Hasta cuándo?

Dr. Francisco Bayancela González