Carta de lectores | 28 viajes presidenciales sin resultados positivos
Más criticable aún es que no transparenta sus viajes, pues no presenta informes a la Asamblea Nacional, ni a nadie
Es increíble la falta de sindéresis y de transparencia en los distintos viajes al exterior que ha realizado Daniel Noboa, en muchos casos con comitivas muy numerosas que en nada aportaron a una evolución positiva ni a beneficios para el país, más aún en medio de la crisis económica que atravesamos, con deudas impagables a sectores como municipios, prefecturas y prestadores de servicios, quienes sostienen a pacientes con enfermedades catastróficas, especialmente a quienes reciben diálisis.
Más criticable aún es que no transparenta sus viajes, pues no presenta informes, como es su deber, a la Asamblea Nacional ni a nadie.
Y para poner la cereza en el pastel, tras su derrota en la Consulta Popular, su vanidad y ego fueron profundamente heridos y se embarcó en el avión presidencial rumbo a su país natal, Estados Unidos, a derramar lágrimas de cocodrilo.
La vida le enseñó que hay que ser humilde en la victoria y en la derrota. Se creyó infalible, pero el destino le jugó una mala pasada.
Ojalá esta experiencia lo lleve a gobernar, aunque es poco probable. Antes de irse cambió medio gabinete al azar, generando una evidente inestabilidad.
Nada cambia, pese a su eslogan “Un Nuevo Ecuador”. Nos preguntamos: ¿qué ha cambiado, si es casi lo mismo que en los dos gobiernos anteriores, o peor?
Continuando con sus viajes, utilizó el avión presidencial para asuntos personales sin explicación, con dineros de un pueblo que muere de hambre y de enfermedades como la desnutrición infantil.
Los reos mueren por cientos, existen más de mil enfermos de tuberculosis y ya se registran 600 muertes, mientras la Defensoría del Pueblo guarda silencio.
Sr. Noboa, dedíquese a gobernar y deje el proselitismo.
Viajó incluso a Noruega para la entrega del Premio Nobel de la Paz a María Corina Machado, mientras en nuestro país continúan la violencia, las extorsiones y el sicariato, que ni las Fuerzas Armadas ni la Policía han logrado frenar, pese a 12 estados de excepción.
Vivimos en constante zozobra, mientras usted sigue viajando por el mundo.
Luis Mario Contreras Morales