Cambien las leyes por favor

Es lamentable, pues no hay verdadero liderazgo y tenemos un podrido sistema político que hace las leyes

Lo peor que le está pasando al país lo vemos diariamente: sicariatos a la carta, microtráfico en la mayoría de barrios de las ciudades; tentáculos del narcotráfico que tienen en zozobra a los puertos de toda la costa ecuatoriana. Policía y FF. AA. no se abastecen para controlar este flagelo que dejaron como herencia los dos últimos corruptos gobiernos que antecedieron al actual. Las principales leyes no han sido cambiadas como es el clamor ciudadano: La Constitución vigente desde 2008; la actual ley de elecciones, en donde cada dos y cuatro años, aparecen los nuevos salvadores y mesías de la patria, magos que, en algunos casos, son los mismos de siempre, que no hicieron nada en cargos que ocuparon en el pasado; y lo peor: no tienen preparación académica de cuarto nivel, más de 10 años de experiencia profesional ni pasado político. Por el famoso COIP que sustituyó al Código Penal, los pillos pueden salir tras su detención con medidas alternativas, sustitutivas, con grillete, pues “hecha la ley hecha la trampa” y de esos pillastres tenemos muchos en el país, principalmente los que hacen política, que nunca trabajaron decentemente. Ni qué decir de leyes que deberían cambiar: como el sistema educativo, el de seguridad social, etc. Aquí no hay verdadero sistema de planificación a corto, mediano o largo plazo, y va a seguir así. Es lamentable, pues no hay verdadero liderazgo y tenemos un podrido sistema político que hace las leyes. Mientras esto no cambie seguiremos igual.

Roberto Flores