La pugna por el regreso a clases presenciales en Guayaquil se mantiene entre el Municipio de Guayaquil y el Gobierno central. Xavier Narvaez, director de Justicia y Vigilancia del Municipio de Guayaquil, precisa que son siete los colegios clausurados, no ocho como se dijo ayer.

Se mantiene en que la educación puede continuar de forma virtual y que las puertas solo deben estar abiertas para personal administrativo.

Sobre las acciones legales anunciadas por el Ministerio de Educación, dice que tienen los argumentos epidemiológicos suficientes para mantener la resolución de que la presencialidad no volverá en lo que queda de este año lectivo.

La próxima semana se evaluarán las medidas en base a las cifras epidemiológicas y se seguirán tomando medidas, acota.

En los establecimientos reincidentes "no vamos a retirar alumnos pensando en no causarles otra incomodidad, pero la irresponsabilidad de las instituciones se sumarán a los procesos legales abiertos actualmente".

Este 26 de enero, con el apoyo de los padres de familia, los estudiantes del colegio Balandra Cruz del Sur, que fue clausurado ayer por el Cabildo, acudieron a recibir clases presenciales de manera voluntaria. Las autoridades del plantel defienden que ellos obedecen la disposición de su órgano rector, que es Educación.