Fue una noche de terror para los empleados de un negocio de pan. Una hora antes de que termine el martes 7 de marzo, delincuentes atentaron contra una panadería ubicada en la ciudadela Kennedy en el norte de Guayaquil.

Los maleantes, quienes llegaron en una motocicleta, lanzaron un artefacto explosivo contra la puerta enrollable del negocio ubicado en la avenida Luis Plaza Dañin y, antes de escapar, amenazaron a las personas que se encontraban cerca del lugar y dentro del negocio afectado.

Afortunadamente la explosión no dejó víctimas, sin embargo, sí resultó en daños materiales. Empleados de la panadería y vecinos corrían asustados tras la detonación, que habría sido hecha por miembros de una organización criminal, que también se dedica a la extorsión.

Minutos después del hecho, agentes de la Policía Nacional llegaron al lugar para recabar indicios y revisar las cámaras de seguridad del sector que grabó el atentado y a los responsables.

A pesar del atentado la panadería sigue atendiendo en sus tres locales ubicados en misma panadería.

Abraham Zevallos, relacionista público de panadería Erick indicó que no han recibido amenazas y que es una sorpresa para ellos el atentado, pero no saben si se trata de un amedrentamiento dirigido a los negocios del sector de manera general.

"Los moradores del sector están organizados, colocaron cámaras propias en esquinas estratégicas de esta zona y esperan que la Policía tenga resultado lo más pronto posible", afirmó.