Era. El cierre del último container de armas de las FARC, entregado el martes a la misión de la ONU en Colombia.

Los ninos salen de las FARC

112 menores han sido trasladados desde las zonas veredales hasta los lugares de acogida. 5.000 hombres para proteger a exguerrilleros en zonas de riesgo.

Nunca se tuvo una cifra exacta. Muchos guerrilleros fueron reclutados siendo niños y se hicieron mayores de edad en las filas de las FARC. Hasta mayo pasado, el número dos de este movimiento, Iván Márquez, decía que podrían ser 21 los menores que aún formaban parte de la estructura. El Gobierno de Colombia refutó el dato y aseguró que eran al menos 170. Esta semana, el día en que las FARC entregaban las últimas armas a la ONU, culminó la desvinculación de los niños de sus filas.

En total, a través de siete operaciones humanitarias, 112 adolescentes fueron rescatados desde septiembre de 2016.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) recibió el martes a 24 menores de edad que salieron de los campamentos guerrilleros como parte del compromiso adquirido en el acuerdo de paz que el Gobierno y la ya exguerrilla firmaron el pasado noviembre. En los últimos meses, las FARC habían entregado 86. Tras comprobarse que se encontraban en condiciones de salud aptas para viajar, fueron llevados por personal de Unicef y del Gobierno hacia los espacios transitorios de acogida, que algunos ya abandonaron. Al menos 39 fueron reclamados por sus familias, aseguró ayer Paula Gaviria, consejera presidencial para los Derechos Humanos. La mayoría son adolescentes y jóvenes para quienes el Estado está gestionando cupos educativos y su vinculación al sistema de salud a través del programa especial Camino Diferencial.

Gaviria reconoce que faltan algunos por salir de las zonas donde los excombatientes se concentran desde el pasado enero. Es difícil convencerlos, dice, ya que muchos, cercanos a la mayoría de edad (18 años), han creado vínculos familiares dentro de las FARC. “Mujeres y hombres (de entre 15 y 18 años) tienen sus hijos y han asumido que esa es su familia y no quieren apartarse”, explicó el ministro del Interior Guillermo Rivera a Blu Radio.

Los niños que ya están fuera de estas zonas y que no tienen familia formarán parte de un programa especial que busca el restablecimiento de derechos, reparación, inclusión social y reincorporación, en el que participa el estatal Instituto de Bienestar Familiar, que entre 1999 y marzo de 2015 había recibido a 5.753 menores de edad que fueron desvinculados de los grupos armados. La mayoría fueron hombres (72 %).

Los menores que decidan no acogerse al plan diseñado para ellos tendrán un acompañamiento del Estado que analizará sus condiciones y que deberá ofrecerles garantías para el restablecimiento de sus derechos. En cualquier momento pueden entrar al programa diseñado por la Consejería de Derechos Humanos. Esa puerta no se cierra, aunque ayer se haya dado un balance final.

En febrero de 2016 las FARC anunciaron que dejaban de reclutar menores de 17 años, un punto acordado al inicio de los diálogos. Sin embargo, el capítulo de los niños en la guerra en Colombia no termina. El procurador Fernando Carrillo ha advertido sobre las denuncias de reclutamiento de menores por parte de la disidencia de las FARC y de otros grupos armados que siguen operando en Colombia. El gran desafío, dice, es que tras el desarme se evite que nuevamente en Colombia los niños tengan que cambiar la escuela por el monte y las armas.

Conexas

Compensación

El gobierno colombiano ya tiene en su poder un listado de bienes y activos de las FARC que fue elaborado por la ONU y que, según recoge el acuerdo de paz, serán utilizados para reparar a las víctimas, informó ayer el ministro del Interior, Guillermo Rivera.

Siglas

El número dos de las FARC, Iván Márquez, dijo el martes que, tras convertirse en movimiento político, mantendrán sus siglas: “Seguramente se llamará Fuerza Alternativa Revolucionaria de Colombia. No queremos romper los vínculos con nuestro pasado”.

Siete meses

22 muertes en las filas rebeldes

El gobierno colombiano anunció ayer el plan de seguridad para proteger a unos 7.000 excombatientes de las FARC frente a los asesinatos que han denunciado los líderes de la futura organización política, 22 en lo que va del año. Las fuerzas armadas destinarán unos 5.000 hombres a resguardar 10 de las 26 zonas donde quedaron concentrados los rebeldes después de su desarme, y que presentan mayor riesgo, explicó el ministro de Defensa Luis Carlos Villegas.