Desesperación. Los familiares pedían ayer que se castigue a los responsables del asesinato.

Murio por defender a su hija de un delincuente

Jorge Venegas salió de su vivienda para comprar unos pañales el viernes, acompañado de su esposa e hija. Eran cerca las 17:30 y minutos después escuchó unas detonaciones cerca de donde se encontraba.

Jorge Venegas salió de su vivienda para comprar unos pañales el viernes, acompañado de su esposa e hija. Eran cerca las 17:30 y minutos después escuchó unas detonaciones cerca de donde se encontraba. En ese momento ignoraba que con uno de aquellos disparos habían asesinado a su progenitor, Walter Rogelio Venegas Magallanes, de 45 años.

Al regresar, el joven se desmoronó ante los gritos desgarradores de sus hermanas. “Le dispararon a mi papi”, dijo una de ellas, de 16 años, en la manzana 1070, de la ciudadela Las Orquídeas, al norte de Guayaquil.

Al lado de la casa de Venegas quedó un charco de sangre como huella del crimen. Ayer en la mañana, sobre esa mancha, colocaron un cartón y encendieron velas por el alma del hombre que por defender a su familia fue baleado.

La menor de edad no paraba de llorar y lamentar la muerte de su progenitor. “Papito, ¿por qué te pasó esto?”, gritaba cuando pasado el mediodía de ayer sus parientes llegaron a casa con el cofre mortuorio de Walter Venegas.

Ella recordó que su madre, su hermana, de 20 años, y una pequeña de un año y seis meses estaban al pie de la vivienda, y un presunto ladrón se les acercó para robarles el celular y les disparó a los pies para amedrentarlas.

El papá salió a defenderlas y uno de los delincuentes le disparó en uno de sus hombros. Según indicaron los parientes, el audaz individuo se metió al local y Walter Rogelio tomó el cuchillo que empleaba para cortar la carne que vendía y enfrentó al presunto asaltante, a quien le habría hecho un corte en la cabeza.

El sospechoso herido salió a buscar ayuda de sus ‘panas’, mientras era seguido por el comerciante, quien no avanzó más porque le dispararon.

“Mijo, ponme una película”, fue lo último que el progenitor le dijo a su hijo Jorge, quien al retornar supo que lo habían matado.

Según se conoció, a una cuadra de donde ocurrió el hecho, los supuestos responsables de la muerte de este hombre dejaron botada el arma con la que le dispararon. Un patrullero policial logró la detención de dos sospechosos que fueron llevados a audiencia. AB-IC