César Regalado Es el que más tiempo tenía en el cargo. Estuvo frente a CNT desde 2007.

Otro movimiento de fichas

A ocho meses de terminar el gobierno de Rafael Correa, tres ministerios, una secretaría y una empresa pública cambiaron de cabeza. Poco importó que en sus manos estuviera el manejo de varios asuntos pendientes.

Nadie está a salvo. A ocho meses de terminar el gobierno de Rafael Correa, tres ministerios, una secretaría y una empresa pública cambiaron de cabeza. Poco importó que en sus manos estuviera el manejo de varios asuntos pendientes. Tampoco influyó que, al menos, tres sean parte del grupo cercano al vicepresidente Jorge Glas.

Rafael Poveda es el caso destacado. El ahora exministro coordinador de Sectores Estratégicos deja a medias una nueva ronda petrolera y la posibilidad de construir la Refinería del Pacífico. Este último es uno de los proyectos más promocionados y retrasados de la Revolución Ciudadana.

Poveda era el principal vocero sobre la megaobra. Él anunciaba cuándo había un potencial financiamiento y cuándo no prosperaba. También adelantó que, hasta finales de año, habría datos concretos para la construcción.

El Decreto Ejecutivo No. 1192, publicado el jueves, no detalla los motivos de su salida. Como reemplazo, Correa designó a Augusto Espín, hasta ayer, ministro de Telecomunicaciones.

En el Gobierno hay sorpresa por la salida de Poveda. Fuentes que prefirieron no publicar sus nombres recordaron que él trabajó desde 2007 de cerca a Jorge Glas. El cada vez menos opcionado para la candidatura a la presidencia de la República por Alianza PAIS -el martes el oficialismo recibirá a Lenín Moreno con tarima y show- consideraba al exministro como parte de su equipo de confianza.

Un caso similar es el de CNT. La empresa pública estaba en manos de otro ‘Glas boy’: César Regalado. Él también dejó su cargo el jueves.

Donde no hay dudas por el cambio ministerial es en Transporte y Obras Públicas. El exministro Walter Solís, otro hombre de confianza de Glas, salió por no cumplir los plazos y pedidos de Carondelet. El presidente Rafael Correa confirmó las razones, ayer.

Aunque Solís presentó su renuncia aduciendo motivos personales, la verdad es que el primer mandatario pidió su salida porque el Puerto de Manta no fue concesionado. En una entrevista en Huaquillas, El Oro, el jefe de Estado dijo que bajo la dirección del exministro se perdió la oferta de la única empresa que mostró interés en el puerto. Las demoras en la negociación molestaron al interesado y, más aún, al presidente.

¿Quién reemplaza a Solís? Boris Córdova. Él fue viceministro en la cartera de Estado.

No fue el único ascenso durante el ‘jueves negro’ del gabinete presidencial. Ligia Álava también dejó el viceministerio de Telecomunicaciones para ocupar la oficina ministerial. Ella reemplaza a Espín.

El último cambio, al menos hasta esta hora, fue el de Omar Simon. El expresidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) era secretario general de la Presidencia. En ese puesto, Simon organizó varios actos y hasta propuso facilitar un encuentro boxístico entre Correa y el asambleísta Andrés Páez.