El gusano de chontacuro, lo exótico del Oriente en la ciudad

El gusano de chontacuro, lo exotico del Oriente en la ciudad

Para muchos en la ciudad puede resultar poco apetecible y hasta repulsivo el solo hecho de imaginarse comer gusanos. Sin embargo, al mencionar chontacuros, en la Amazonía del país, lo que se percibe es distinto.

Son parte de la dieta alimenticia de los indígenas orientales. Los consideran una delicia, aparte de que son conscientes de su alto contenido vitamínico, que los convierte en un atractivo gastronómico para ser degustados por turistas nacionales y extranjeros.

En Guayaquil, en las afueras del mercado Central, en las calles 10 de Agosto y Clemente Ballén, Galvy Bonilla, oriundo de la Amazonía, comercializa estos gusanos traídos del Oriente ecuatoriano.

“Muchas personas que ya lo han probado, lo consumen por sus propiedades curativas, especialmente se le reconocen beneficios al utilizarlos enfermos del sistema respiratorio, bronquitis, tos, gripes y enfermedades de los pulmones en general; otros lo consumen simplemente por su buen sabor o como un complemento a su alimentación diaria”, manifiesta Bonilla.

Su nombre varía según el idioma de cada comunidad amazónica. Son reconocidos como mayones o chontacuros, en shuar mundish o en achuar muquindi.

Según José Luis Gualinga, kichwa representante de la juventud del pueblo originario de Sarayaku, ubicado en la provincia de Pastaza, estos gusanos son consumidos por todos los habitantes de la Amazonía, porque ayudan a limpiar el organismo, alivian enfermedades como la diabetes y contra el colesterol. Este es uno de los alimentos que les provee la selva.

Los chamanes son los únicos que no lo consumen. “Ellos dicen tener una energía similar a la que proporciona el gusano. Espiritualmente hacen la misma actividad que hace el gu sano para sanar a las personas. De acuerdo a sus creencias, esto les impide consumirlos”, dijo Gualinga. (F)