Celebración. Jonatan Álvez, delantero de Barcelona, festeja luego de marcar el tercer gol amarillo a Liga de Quito, club donde jugó el año anterior. El uruguayo sumó su cuarto tanto en la temporada con el conjunto canario.

La fiesta torera fue completa

Fue una tarde redonda para Barcelona, no solo porque el Ídolo ganó con contundencia a Liga de Quito mostrando buen fútbol sino que tras la goleada es el líder absoluto del torneo ecuatoriano. Si esos dos ingredientes fueran poco, la vuelta del uruguayo Brahian Alemán al Monumental no fue feliz, algo que deseaban los hinchas amarillos.

El “oleeee” que se escuchó en las graderías luego del quinto gol solo era una muestra de la alegría que ayer vivieron los aficionados en el ‘Coloso del Salado’, que lució abarrotado para ver la victoria de los locales, quienes tienen la cuenta perfecta en casa: 12 puntos disputados y los mismos ganados.

Es que la goleada, en medio de un aguacero, es fruto de la ambición ofensiva de Barcelona, con un Damián Díaz manejando el mediocampo, juntándose con Cristian Penilla, Ely Esterilla y Jonatan Álvez, los tres delanteros que desnudaron a una defensa azucena que careció de argumentos para frenar la vorágine de goles.

Por las bandas y por el centro, todos los caminos fueron válidos para generarle problemas a Liga de Quito, que pese a ello resistió con el arco en cero hasta los 36 minutos, luego que Esterilla, Richard Calderón y Darío Aimar no lograron convertir; pero el gol era cuestión de tiempo y nada más.

Primero fue Pedro Pablo Velasco el que venció a Daniel Viteri. Con los azucenas heridos, el oportunismo de Penilla fue clave para ir con dos arriba al descanso. En la complementaria, Álvez, exjugador albo, logró su tanto y lo emotivo fue cómo se fundió en un abrazo con los hinchas canarios.

Esterilla, con dos conquistas, le puso sello a la goleada. El triunfo fue completo con el penal que Damián Lanza le atajó a Alemán, en una vuelta para el olvido a la que fue su casa y en la que ya no es bienvenido el uruguayo.