El Ministerio de Relaciones Exteriores informó este 17 de mayo de 2021 que Ecuador buscará dialogar con el gobierno chino para lograr un acuerdo sobre el destino de los 10.000 fusiles AK-47 que fueron donados por Beijing en 2016.

En un comunicado, la Cancillería agradece “la buena voluntad de la República Popular China en todas sus manifestaciones de ayuda a nuestro país”, a la vez que hace esta invitación para que se tome una decisión de mutuo acuerdo.

El pasado 7 de abril el ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, anunció que este armamento sería chatarrizado porque estudios técnicos realizados a los AK-47 determinaron que llegaron con falencias técnicas y de seguridad. Incluso, estaban fabricados para zurdos, según el funcionario.

El 11 de mayo pasado, el ministro ratificó la decisión de destruir las armas, ante la “sorpresa” que mostró el agregado militar de la Embajada de China en Ecuador al conocer la inconformidad ecuatoriana con las armas donadas y el destino que les daría.

Jarrín aseguró que son tres informes: de Contraloría, de la fábrica de Municiones Santa Bárbara y del Grupo de Fuerzas Especiales de las Fuerzas Armadas los que avalaban esta decisión, y descartó la posibilidad de hacer adecuaciones en los fusiles para ponerlos a funcionar.

El ministro dejó abierta la posibilidad de que si China quiere reemplazar la donación por otro armamento, sería aceptado de inmediato.