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El costo de quedarse a estudiar

Obtener un título de cuarto nivel se ha vuelto una necesidad. Aunque la oferta en las universidades del país aumenta, los estudiantes optan por alternativas en el exterior a la hora de realizar estudios de posgrado, en parte, por los costos.

Obtener un título de cuarto nivel se ha vuelto una necesidad. Aunque la oferta en las universidades del país aumenta, los estudiantes optan por alternativas en el exterior a la hora de realizar estudios de posgrado, en parte, por los costos.

Cindy Guim es ingeniera en Producción en Artes Audiovisuales. Desde hace seis semanas vive en Barcelona y cursa una maestría en Comunicación Social orientada a la investigación, en la Universidad Pompeu Fabra.

Su situación es parecida a la de muchos profesionales que desean realizar posgrados en el país: escasez de oferta, poca flexibilidad de horarios y precios altos para su presupuesto.

“Una maestría (en Ecuador) está entre los 12.000 y 14.000 dólares. Entiendo que tengan que invitar a docentes del exterior, pero creo que el precio no brinda facilidades”, señala.

Su maestría cuesta 5.020, casi la mitad de lo que cuesta la mayoría de posgrados en Ecuador. Lo que ahorra en educación lo invierte en manutención, pero señala que la experiencia es un complemento.

Por su trabajo, Eduardo Calderón decidió cursar la maestría en Gestión de Talento Humano a distancia, en la Universidad Iberoamericana de México, mediante una beca con la que paga 3.000 de los 10.000 dólares que cuesta.

“Busqué una maestría en la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), pero son de hasta 16.000 dólares. En algunas maestrías exigen dos años ejerciendo con el título”, indica.

Para quienes tienen familia o un trabajo estable que no piensan dejar, la única opción es quedarse a estudiar, aunque eso implique un costo mayor.

Danilo Manosalvas realizó su maestría en Legislación Tributaria en la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG). Esta tuvo un costo de 8.000 dólares, pero utilizó un crédito del Instituto de Fomento de Talento Humano, antes conocido como IECE.

“No la hice fuera del país por complicaciones logísticas. Tengo que trabajar para mantener a mi familia”, explica.

En marzo de este año, el presidente de la República, Rafael Correa, propuso una política de subsidios para posgrados en universidades privadas y cofinanciadas para evitar distorsiones en la asignación de recursos estatales a este ámbito.

Al respecto, René Ramírez, titular de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), indicó ese mes que la participación de matrícula de posgrado en el país es de 5 %.

De acuerdo con esos datos, había 18.719 becarios estudiando en universidades del exterior: el 63 % está siguiendo una maestría y el 10 % un doctorado. De 2007 a 2016 se entregaron 3.407 becas en Guayas.

A diferencia de los países europeos y sudamericanos, en Estados Unidos y Canadá el costo de los posgrados es superior.

Desde la semana pasada, este Diario ha solicitado a la Senescyt y al Consejo de Educación Superior (CES), información actualizada del número de becarios de posgrado en el exterior y de universidades que ofertan posgrados en Ecuador. Ambas instituciones ofrecieron entregarla.

La contratación de docentes y el límite de cupos suben el costo

En la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) se ofertan 16 maestrías profesionalizantes, dos de investigación y dos doctorados.

Cecilia Paredes, vicerrectora de esta institución, menciona que los precios, que van de 4.000 a 12.000 dólares, se determinan por el recurso humano, la infraestructura, las pasantías que los maestrantes realizan en el exterior y el cupo máximo de estudiantes establecido por el Consejo de Educación Superior (CES).

No obstante, señala que la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt) debería ofrecer becas a ciudadanos que deseen estudiar posgrados en los programas de las instituciones del país de categoría A, sin necesidad de tener convenios con universidades del exterior.

Walter Mera, vicerrector de Investigación y Posgrado de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG), coincide en que los factores determinantes son la contratación de docentes y la demanda.

Comenta que, en relación a periodos pasados, esta se ha mantenido y lo atribuye a la situación económica del país. “Antes de pensar en educación, la gente piensa en cosas más esenciales”, indica.

Educación Superior está a favor de subsidiar posgrados

Enrique Santos, presidente del Consejo de Educación Superior (CES), enfatizó que en el país existen dos universidades cuya oferta es solo de cuarto nivel, pero que esta se inclina casi exclusivamente a las ciencias sociales.

“Creo que el subsidio del Estado no puede destinarse única y exclusivamente hacia los programas del área social y de las humanidades. También tiene que orientarse hacia las ciencias duras, experimentales, y eso significa indudablemente una reforma a la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES)”, afirmó.

Agregó que el CES tiene planteado discutir ese tema y que esta modificación a la LOES no contempla la gratuidad del posgrado, sino la dotación de recursos para cubrir áreas de mayor importancia para el desarrollo estratégico del país.

Además, indicó que estas ofertas no deberían concentrarse en dos ciudades, como ocurre actualmente, sino que deben distribuirse entre las instituciones de categorías altas de otras provincias.

Dijo que “la idea de este proceso es que cada vez que se generen excedentes generales del sistema, en las (universidades) financiadas por ejemplo, pasen al fondo común de las universidades para posgrados”.