Coca-Codo Sinclair

Generalmente se admite en países como el nuestro, que suele transcurrir algo más de una década entre la presentación de un proyecto de interés público y su concreción.

En el caso del largo tiempo transcurrido entre las primeras manifestaciones de la potencialidad de aprovechamiento para fines de generación de energía hidroeléctrica a partir de las especiales condiciones de la cuenca del río Coca, la realización de estudios y su puesta en marcha, hablamos de al menos 40 años.

En efecto, los primeros trabajos para tomar conciencia de la capacidad de llevar adelante un proyecto hidroeléctrico de la magnitud que se vislumbraba, los realizó en 1976 el por entonces organismo público de energía eléctrica: el Inecel, que llevó adelante un inventario energético de la cuenca los ríos Quijos y Coca, desde sus orígenes hasta precisamente el denominado Codo Sinclair, así llamado en homenaje al geólogo petrolero norteamericano Joseph Sinclair que hizo conocer, en 1927, una pronunciada curva del río Coca con posibilidad de ser utilizada para generar energía.

De entonces a la actualidad, tal vez una crónica desidia, la magnitud de los recursos requeridos para desarrollarlo o el entrecruce de los intereses generados alrededor de la explotación petrolera, incluso una mezcla de todos esos factores, hizo que pasara el tiempo, sin asumir su construcción. Se continúo contratando consultorías hasta que en el 2008 se constituyó la compañía hidroeléctrica Coca-Codo Sinclair, que constató que se podría generar hasta 1.500 megavatios en una sola etapa, firmándose el 2009 un contrato con Sinohydro Corporation.

No sin vicisitudes de distinta naturaleza, que retrasaron ligeramente las fechas pactadas para su inauguración, el emblemático día 13 del presente mes se pusieron en marcha 4 de las 8 turbinas proyectadas, que con sus 750 megavatios cubren el 15 % de la demanda nacional, de modo que el proyecto terminado significará una cobertura del 30 % de dicha demanda. Esto es altamente significativo en términos de ahorro en el uso de combustibles fósiles y sobre todo, en contaminación ambiental, otorgándole al país incluso capacidad para ser exportador de energía de origen hídrico.

Sin duda, Coca-Codo Sinclair constituye un hecho relevante en el avance hacia una nueva matriz productiva.