
El Estado uso $ 893 millones para obras en dos meses
En los dos primeros meses de este año esa cifra se adjudicó al Gobierno, municipios, prefecturas, seguridad social y empresas públicas.
En discurso, el gasto público debe reducirse significativamente por la delicada situación económica del país. En los hechos, la contratación estatal de obras y servicios con el sector privado creció en los dos primeros meses de este año. Un aumento de 91 millones de dólares entre enero y febrero de 2018 y el mismo período del año pasado.
Según información del Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop), en los dos primeros meses de este año se adjudicaron 893,3 millones de dólares para el Gobierno, los municipios, prefecturas, la seguridad social y las empresas públicas. Un año antes se asignaron solo 802,7 millones de dólares.
El aumento responde, en su mayoría, a inversiones de empresas como Petroecuador y la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL). En gobiernos seccionales destaca, en cambio, el Municipio de Guayaquil. El Cabildo contrató obras, entre enero y febrero, por 16,8 millones de dólares.
¿Qué obras financió? Uno de los gastos más importantes de Guayaquil fue el inicio del Plan Comunicacional de la Empresa Municipal de Tránsito de la ciudad. 2,6 millones de dólares se usaron para ese proyecto.
La Prefectura de Azuay gastó un monto similar (2,7 millones de dólares) para el mejoramiento de las vías del cantón Cuenca. En la lista de gobiernos seccionales que también utilizaron recursos para proyectos -a través del servicio de contratación pública- están Chone, Orellana y El Oro.
En total, las prefecturas y municipios gastaron 349,8 millones en 2018, una reducción de 11,3 % comparado con el período analizado de 2017.
La reducción de contratos de los gobiernos autónomos descentralizados es compensada -e incluso superada- por el gasto del gobierno central y el seguro social. Las inversiones de este último en hospitales y equipamiento provocó un alza de 58 millones de dólares. Pasó de 40 a 98,2 millones.
También hay un aumento en el gasto del Gobierno de Lenín Moreno comparado con los últimos meses de gestión de Rafael Correa. Las entidades del Ejecutivo, en la era Moreno, gastaron 212 millones de dólares. En enero y febrero de 2017, durante el último período de Correa en el poder, el gasto en contratación de obras fue de 152,4 millones de dólares.
La diferencia no es solo monetaria, el destino de los recursos también cambió. Tal como ofreció en campaña, Moreno redireccionó el gasto de sectores estratégicos a las obras de bienestar social, aunque no descuidó ninguno de los dos. El actual presidente utilizó 102,4 millones de dólares para temas sociales. El año previo fueron solo 43,8 millones de dólares.
Moreno disparó, además, la contratación de obras públicas para educación y salud. El incremento en estos segmentos superó el 121 %. Se adquirieron, por ejemplo, equipos modernos para exámenes de laboratorio del hospital Vicente Corral Moscoso de Cuenca.
Un giro a la transparencia
Los mecanismos de contratación pública también cambiaron con la salida de Rafael Correa. Petroecuador, por ejemplo, abandonó la modalidad de giro específico del negocio y optó por procesos públicos y, según las actuales autoridades, “más transparentes”.
El giro específico del negocio permitía que las gerencias de las petroleras negocien directamente con una empresa privada.
El catálogo electrónico (mecanismo público ubicado en la página web del Servicio de Contratación de Obras Públicas), la licitación y la subasta inversa fueron los métodos más utilizados para la contratación de obras públicas. En total, $ 541,4 millones se adjudicaron por esas tres vías. Por contratación directa, en cambio, se utilizaron unos $ 7 millones. Otro mecanismo, aunque poco utilizado, fue el de las ferias inclusivas.
Petroecuador: El mayor comprador del Estado contrató, por ejemplo, servicio comercial para la provisión de aceites, lubricantes y grasas. Incluyó asesoría privada.
CNE: La consulta popular obligó al CNE a adquirir servicios de comunicación centralizada de datos y de conectividad en los recintos electorales de todo el país.
IESS: En los primeros meses del año, el IESS adquirió un sistema corrector para escoliosis y, además, compró equipos para el hospital Carlos Andrade Marín, de Quito.