Riesgo país (I)

¿Por qué, a pesar de todos los esfuerzos del Gobierno de mantener la casa en orden, no se logra reducirlo?
Habiéndose el Gobierno del encuentro enfocado en “poner la casa en orden”, en adecentar las cuentas fiscales mediante la reducción del déficit -siempre por la vía de más impuestos y no de un recorte de gastos- con miras a tener una macroeconomía estable y saludable, resulta difícil de entender cómo el riesgo país sigue en alza. Atrás quedó el optimismo que generó la última elección presidencial cuando al posesionarse este gobierno, en mayo de 2021 el riesgo país se ubicaba en los 714 puntos, logrando mantenerse en esos niveles durante su primer año. Esto se logró gracias a la excelente imagen que ofrecía el país al mundo, a la seriedad y confianza que brindaba el Gobierno a los mercados internacionales y a la solvencia política que proyectaba. Pero tan solo un mes después de haber cumplido su primer año, en junio de 2022, cuando los indígenas se tomaron el país, bloqueando carreteras, asediando la capital como delincuentes, incendiando el país y paralizando el aparato productivo que sostiene nuestra frágil economía, el riesgo país escaló a los 1.165 puntos. Luego de 18 días de paralización y casi mil millones de dólares en pérdidas, se iniciaron las famosas mesas de diálogo, en las cuales se otorgó a los delincuentes de poncho un espacio de opinión y de decisión que no se habían ganado nunca en las urnas; es en este contexto cómo, de forma abrupta, nuevamente el riesgo país volvió a subir, sobrepasando los 1.400 puntos. Finalmente, una vez culminado el proceso de diálogo, en el cual se llegaron a múltiples acuerdos y desacuerdos, donde se habló de continuar los diálogos en mesas de seguimiento a los acuerdos alcanzados, de forma casi inexplicable el riesgo país mantuvo su vertiginosa tendencia al alza, llegando así a alcanzar los 1.945 puntos.
¿Qué hace tan inmanejable este índice de riesgo y qué importancia tiene para todos? ¿Por qué, a pesar de todos los esfuerzos del Gobierno de mantener la casa en orden, no se logra reducirlo? El riesgo país mide la capacidad de un país de cumplir con sus deudas y de crear un ambiente apropiado para las inversiones. Para ser más precisos, mide la percepción de los mercados de capital con respecto a la capacidad de un país para pagar sus deudas y la percepción del ambiente, favorable o no, para las inversiones. La imagen proyectada inicialmente por el Gobierno fue muy favorable y bien recibida por la comunidad internacional, incluso cuando aún no se posesionaba ya había una reacción favorable de los mercados. La inmejorable gestión frente a la pandemia hizo del Ecuador un ejemplo para el mundo. Sin embargo, el capital político se agotó rápidamente, la relación desafiante con la Asamblea Nacional impide la aprobación de la legislación necesaria para lograr reformas económicas necesarias para incentivar la inversión privada, mientras que la inseguridad jurídica desincentiva a las empresas extranjeras a traer sus capitales al país. A esto se suma el levantamiento indígena que reveló la incapacidad del Gobierno para gobernar un país ingobernable; la agitación en las calles puso al descubierto la precariedad del tejido social, las heridas profundas de los pueblos, el resentimiento histórico de las nacionalidades indígenas y la fragilidad del aparato productivo y de la economía del país. (Continuará…)