Terrorífico viaje a la costa
¡Váyanse a la porra! Infelices ladrones, ya no les creo y no les voy a pagar. Por favor, que alguien elimine ese maldito “Fotoradar”. Alguna autoridad que nos ayude
Pero no por lo insoportable que puede ser el congestionamiento del tráfico, o producto de este, algún tipo de accidente; o sufrir un asalto en media carretera, o llegar al mar y ser víctima del ataque de un tiburón. No amigos, no son los tiburones del mar, sino los depredadores tiburones terrestres a cargo de desgarrarnos el dinero de nuestros bolsillos con los desprestigiados, deshonestos, y descalibrados radares.
Hace unos dos meses, con mi esposa viajamos a Salinas, y unos días después nos llegó una notificación de 4 multas de tránsito por exceso de velocidad, en ese mismo día. ¡Qué locura! Ya estamos en una edad en la que manejamos a velocidad súper moderada. Admitimos, puede ser que en algún momento hayamos rebasado el límite de 100 km/h. ¡pero no 4 veces! Y el más alto era de 106 km/h.
Por más que hicimos el uso del pataleo tuvimos que pagar con total indignación.
Pero eso no es todo. El 24 de julio volvimos a viajar a Salinas.
Creímos haber “aprendido” la lección, por tal motivo, esta vez nos hicimos casi tres horas de viaje, porque fuimos controlando de no pasarnos jamás de 90 km/h; así es, a menos de 90 km/h. Pero ¡oh sorpresa!, nos acaba de llegar “Nueva Citación Fotoradar”, velocidad: 106 km/h. Imposible, inaudito.
¡Váyanse a la porra! Infelices ladrones, ya no les creo y no les voy a pagar. Por favor, que alguien elimine ese maldito “Fotoradar”. Alguna autoridad que nos ayude.
Roberto Montalván Morla