Messi y Roures, de héroes a villanos
“Messi, de héroe a villano” titula un conocido diario, tachándole de ídolo con los pies de barro por despedir, sin más, a cuarenta (40) empleados, al adquirir otro hotel de lujo, en Sotogrande. Sí, se trata del mismo “héroe” que, tras una vida entera en el Club, se fue llorando lágrimas de cocodrilo y jurando que “no se había enterado” de la última rebaja que le pedía, por no poder más, el Barcelona en su gran crisis económica y deportiva. También este mismo domingo otro diario resalta cómo en los premios Goya, Santiago Robles (hoy convertido en Jaume Roures) ha tenido el valor de recoger en persona el premio al film El buen patrón (no se rían, por favor). Sí, se presentó él y no los que lo trabajaron. También es el mismo que en su día desechó cuando, en plena crisis, tuvo que dejar de publicar en papel El Periódico, la oferta de sus empleados para continuarlo. Los auténticos intereses de ambos, ahí están los hechos, son los que siempre tuvieron. Como los que hicieron a uno abandonar Argentina y a otro renegar de su patria grande e incluso disfrazar los apellidos de su familia. Su Dios es el dinero, como demuestran sus hechos. Le adoran e intentan acercarse al máximo a él, sacrificando para ello cualquier otro ideal o persona que crean que se interpone en lo más mínimo en su camino.
Diego Mas