Cartas de lectores

Escupe hacia arriba y en la cara te cae

La no aprobación por parte del Ejecutivo y Legislativo de la extinción de dominio, la eliminación de la tabla de consumo de estupefacientes, la excepción de reelección de candidatos a asambleístas que tienen pendientes casos con la justicia (la prensa dice que es el 60 %), la reestructuración de los artículos 119 y 208 de la Constitución: el 119 por falta de requisitos para ser asambleístas y el 208 por despartidizar la elección de las autoridades de control, Cpccs, contralor, fiscal general, etc. (cómo se van a quitar el poder ellos mismos si no se les exige que en sus funciones no pueden, no deben, ser jueces y parte), que un delincuente con tres detenciones policiales seguidas se quede en la cárcel por un año, sin fórmula de juicio, sino por ley.

En un Estado o país es la independencia de los poderes la condición necesaria para que pueda calificarse de democrático.

El proceso de escogimiento de candidatos a ocupar puestos de “funcionarios autoridades” de esos tres poderes se lo hace en representación de partidos políticos y de sectores geográficos, cuando dichos dignatarios deben representar formación profesional para servir al país, no a un sector geográfico, ni a intereses partidistas (lo que favorece a la desadministración centralista).

El sistema electoral no debe tener influencias políticas, para que no sea juez y parte. ¿O acaso no se dan cuenta de que ser juez y parte es deshonestidad?, por decir lo menos. Quienes actúen de esa forma deben de ser destituidos, incluso quienes como jueces contenciosos no dan sentencias razonadas.

Medios de comunicación: que su objetivo en las próximas elecciones sea el promulgar y dimensionar la virtud de los candidatos en la vocación de servicio, no las promesas de cada uno de ellos, en pro de escoger a los mejores representantes a servir al país, no a ideologías, ni a ellos mismos.

Salvador Loffredo A.