Cartas de lectores | Un mundo más de todos

Conjugar el verbo amar en nuestro acontecer diario es la mejor manera de cultivar la aspiración por quererse

Nos hace falta acogernos y recogernos para nuestra propia purificación interior, tener tiempo para sí e interrogarnos con la fuerza del amor divino; meditar sobre nuestros andares y la realidad de la vida humana.

Conjugar el verbo amar en nuestro acontecer diario es la mejor manera de cultivar la aspiración por quererse, para restituir el camino existencial e instituir en nuestra savia la ofrenda conciliadora.

Sabiendo que el mal no tiene la última palabra, no dejemos que se nos trastoque la voluntad agraciada celeste y comprometámonos, con más valentía y entusiasmo, para que nazca un mundo más de todos y de nadie en particular.

Víctor Corcoba