Cartas de lectores | Cine y algo más

Un detalle que me encanta de Nueva York es que al terminar la película que ha sido buena la gente aplaude emocionada

Esto también es hacer patria: la familia Czarninski inauguró un hermoso e imponente edificio en la Av. Orellana, con la más alta tecnología, destinado a varias salas de cine y con un cómodo y elegante salón de comidas. Para los que somos amantes y adictos a la pantalla grande esto constituye un deleite. Gracias, muchas gracias, a ellos y a todas las personas que laborarán en dicho lugar. Felicitaciones.

Tengo gratos recuerdos de Gerard Raad, amigo en quien el paso del tiempo disminuyó el ímpetu analítico de las películas. Muchísimas veces acudí a su cine-forum; hoy quien nos nutre con sus artículos en la revista EXPRESIONES de Diario EXPRESO es Jorge Suárez. Soy asidua lectora de sus comentarios, muy didácticos y analíticos, y muchas veces le escribo a este gran amigo para que me instruya en estos temas.

Sugiero a esta gran empresa realizar, no solo en la época de entrega del Óscar, varios programas de cine-forum. La gran mayoría de la población no conoce de cine. He asistido a ver maravillosas películas como Asesinos de la luna, Oppenheimer, Lazos de vida, Cabrini, Garra de hierro y muchas más, y solo estamos dos o tres personas. En cambio, si son de monstruos, violencia, etc., la sala casi se llena. El cine también es un medio de enseñar cultura.

Un detalle que me encanta de Nueva York es que al terminar la película que ha sido buena la gente aplaude emocionada. Yo he querido hacerlo pero parecería ‘vieja loca’, jajaja, y no me he atrevido.

Martha Jurado Rodríguez