Para la armonía en el hogar
En estos últimos días del mes del Rosario, recémoslo a diario pidiendo la armonía en el hogar.
A veces emitimos comentarios que ocasionan incomodidad en el hogar. Soltamos palabras al calor de un disgusto o de no haber entendido bien lo que se quiso decir. Lo primero es calmarse y analizar objetivamente qué ocasionó el enojo; nos daremos cuenta de que fuimos injustos con nuestras apreciaciones, que no pensamos antes de hablar, que a quien le hablamos mal es alguien con quien compartimos la vida. Entonces hay que actuar, pedir perdón por los comentarios inadecuados, por las ofensas, y hacer el firme propósito de no volver a ofender, de pensar antes de hablar. En estos últimos días del mes del Rosario, recémoslo a diario pidiendo la armonía en el hogar.
Mario Monteverde Rodríguez