Cartas de lectores

La abultada burocracia en el Estado genera el déficit del presupuesto

No es la participación de personal eficiente, idóneo, necesario para el servicio a la colectividad. La mala es la que oscurece y enreda para justificar su pertenencia. En el Estado ecuatoriano hay por lo menos 260 mil puestos burocráticos con contrato ocasional o nombramiento provisional; de ellos, la mitad está de más. Se han inventado la desconcentración administrativa para favorecer a sus bases partidistas, multiplicando tareas y entorpeciendo tramitación. Recuerdo al dictador chileno, que decía que los trámites deben tener tres pasos y si roban que sean esos tres y no tantos que saqueen las arcas del país. Para Weber la sociología está subordinada a la historia. La influencia excesiva de funcionarios en asuntos públicos sin responsabilidad ni culpabilidad, una administración ineficiente a causa del papeleo, rigidez y formalidades superfluas, reglamentos que degeneran la ley. Llamadas telefónicas e instructivos que alteran el normal desenvolvimiento burocrático. El país se encuentra en un caos organizado para su desestabilización continua. Zonales administrativas de todo orden deben asumir la tramitación razonable y no dividirla en distritos, aumentando burocracia innecesaria. Las órdenes vienen de lo alto. Los distritos manejan departamentos jurídicos, talento humano, financiero y direcciones. ¿Hasta cuándo permitimos la obesidad burocrática?

Ab. Franklin Lituma Manzo