Recursos para los cambios urgentes. El Servicio Nacional de Atención a Privados de Libertad (SNAI) recibió por parte del Gobierno central 30 millones de dólares antes de que finalice 2021, exclusivamente para el “mejoramiento de la infraestructura y fortalecimiento de la vigilancia” en las cárceles del país.

El recurso es una parte de los $ 74 millones planificados para el plan de reestructuración del sistema de rehabilitación del país, en un periodo de cuatro años. De ese total, solo atender el complejo carcelario de Guayaquil costaría $ 24 millones, según un estudio.

Esta información la obtuvo Diario EXPRESO tras insistir en reiteradas ocasiones y por varios meses en pedir el detalle de las obras realizadas y la cantidad recibida para enfrentar y cambiar la realidad en los centros de reclusión de Ecuador, luego de que el presidente Guillermo Lasso, desde la declaratoria del estado de excepción, el pasado 29 de septiembre, le ordenó al Ministerio de Finanzas que entregue “los recursos necesarios” para encargarse de la emergencia.

Sin embargo, desde Finanzas se indicó el 1 de diciembre de 2021 que el SNAI recibió algo más de $ 8 millones durante el estado de excepción y que los utilizó para el pago de servicios básicos, adquisición de cámaras de vigilancia, mejoramiento y compra del parque automotor para los controles y operativos en las prisiones.

Después, el 16 de diciembre, el primer mandatario enfatizó en la Gobernación del Guayas, durante la presentación del Comité de Pacificación, que dispuso la entrega de más dinero para que el SNAI cumpla y avance en la repotenciación de las cárceles. “Hace algunas semanas decidimos destinar cerca de $ 75 millones para mejorar la infraestructura y capacidad institucional del SNAI”, manifestó el jefe de Estado. Tampoco reveló pormenores.

Asimismo, Finanzas hasta el día de hoy no responde a este Diario cuándo fue el día exacto en que el Ejecutivo dispuso la entrega y cuándo se dio la plata para las gestiones anunciadas. Además se consultó si los $ 30 millones entregados serán para Guayaquil, como se contempla en el plan de repotenciación de cuatro años, o es para el sistema de todas las cárceles.

El SNAI no aclara (aunque también se solicitó información al respecto) cómo distribuirá los recursos, cuáles serán las obras prioritarias y en qué centros de reclusión se llevarán a cabo. En su escrito señala que “los detalles de esta inversión se trabajan bajo reserva porque incluyen temas sensibles propios de esta entidad”.

Acciones

• Representantes del Comité de Pacificación iniciaron desde hace dos semanas las reuniones con privados de libertad para conocer cuáles son sus requerimientos para “avanzar en la tregua” entre las bandas que operan en el interior de las cárceles. El pasado jueves los comisionados procesaron los pedidos.

Asesoría

Autoridades del SNAI recibieron en Quito a delegados del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario de Colombia, para “analizar el cumplimiento de los procesos de repatriaciones e indultos”. También hubo “intercambio de experiencias” en el tema de inteligencia penitenciaria y reinsersión en la sociedad.

 Realidad

El hacinamiento es uno de los principales problemas del sistema carcelario. La infraestructura existente tiene capacidad para 30.169 reos, pero hasta octubre de 2021 el SNAI tenía un registro de 38.635 presos. Recién en diciembre informó que pudo despachar cerca de 700 reos con boletas de excarcelación.