Un monigote de Spiderman, de siete metros de altura, que se exhibe en la 14 y Alcedo, suburbio de Guayaquil, hizo que Karen Holguín (30) y Miguel Cruz (31) detengan su vehículo, para que su hija Emma (4) se tome una foto junto al ‘gigante’.

La cara de la niña lucía radiante, mientras sus padres trataban de captar ese momento en una fotografía, que le costó $ 1 y que fue tomada con un teléfono celular. Los miembros de la familia Cruz Holguín viven en Samanes 4, norte de la ciudad, y ayer decidieron recorrer la ruta de los monigotes gigantes.

El muñeco fue elaborado por el artesano Carlos Briones durante tres meses, con una inversión de $ 500. “Estoy contento porque al momento ya he recuperado lo invertido”, menciona.

Desde el 26 de diciembre de 2022, que está en exhibición, el Spiderman ha recibido cerca de 2.500 visitas y 1.500 personas han pagado para fotografiarse. “Espero que hasta el 14 de enero haber duplicado ese número de visitas”, señala.

A pocas cuadras, en la 16 y Pedro Pablo Gómez, están los monigotes que caracterizan al gato Tom y al dragón de la película ‘Shrek’. Allí, una decena de visitantes también se tomaban fotos. “Me complace que a este negocio le esté yendo bien, ya que nos hemos esforzado para presentarles al público los personajes que a ellos les gusta”, comenta Pedro Suárez, quien elaboró estos monigotes que miden 7 y 5 metros, respectivamente.

En el lugar estaba Mónica Encalada, quien junto a sus dos hijos se tomaba una selfi al lado de los ‘gigantes’. “Están hermosos. Vale la pena pagar un dólar por un recuerdo que va a durar mucho tiempo”, agregó.

En las calles del Suburbio Oeste de Guayaquil hay 33 coloridos personajes del universo del cine, la televisión, las series animadas, o incluso de la música, que miden hasta 10 metros de alto, elaborados a base de papel, cartón, maderas y otros materiales reciclados.

‘Mazinger Z’; ‘Goku’; ‘Jack Sparrow’; Daddy Yankee; Gene Simmons, bajista de Kiss, la banda estadounidense de rock, son algunos personajes que estarán en exhibición hasta el próximo 14 de enero, cuando serán desmantelados.

Los enormes muñecos concursan, además, por el premio al mejor monigote, cuyo artesano recibe una compensación a su creatividad y esfuerzo, por parte de la Empresa Municipal de Turismo.