Son hinchas acérrimos de un club argentino, a pesar de que viven en Ecuador. Es que para personas como Luis Honorio Guevara, ecuatoriano residente en Manta, el sentimiento prima más que la distancia geográfica.

Fue en 2002 cuando él visitó Buenos Aires durante unas vacaciones. Desde entonces, quedó enamorado del Club Atlético Boca Juniors. Ahí conoció el estadio Alberto Armando, conocido como La Bombonera, y quedó atónito por el fervor que se vivían en sus tribunas.

"Realmente es contagiante, en el mismo barrio de La Boca (al sur de la capital argentina) la gente está metida con la historia, el palmarés de un club campeón de la Libertadores que derrotó al Real Madrid, al Milán en las finales de la Copa Intercontinental, en ese tiempo", expresa Guevara.

Su mayor anécdota: cuando cuatro días antes de la final de la Copa Libertadores 2018, entre Boca y River Plate, sin tener entrada, viajó junto a su hijo a La Bombonera para ver el partido de ida.

"Imagínate llegar allá y buscar entrada para esa gran final, la mamá de las finales. Justo hablaba con un amigo y no creo que se vuelva a repetir, fue inédita. Fue un empate (luego Boca cayó 3-1 en la vuelta), pero para mí fue un triunfo de vida", recuerda con emoción Guevara.

Guevara, socio internacional de Boca, revela que la institución tiene alrededor de 70 "consulados" alrededor del mundo, de los cuales, Ecuador tiene dos: uno en Quito y otro en Guayaquil.

¿CUÁNTOS MIEMBROS INTEGRAN ESOS CLUBES EN EL PAÍS?

"En el partido ante Liga de Quito (2019), llenamos la platea alta. No te puedo decir exactamente cuántos somos, tenemos un grupo de Whatsapp llamado Agrupación Bostera, en el que estamos como 220 personas. Somos entre 58 y 60 socios internacionales. Hay muchos bosteros en Ecuador que no son parte del grupo, pero que sienten ese feeling con los colores", indica el aficionado.

Si hablamos de clubes ecuatorianos, Guevara se considera hincha de Barcelona S.C., pero si tiene que escoger a uno de los dos, se decanta por el cuadro 'xeneize'. Un caso similar es el de Schubert Suing, comunicador social guayaquileño que, desde temprana edad, su familia se mudó a Argentina.

"Mi primera camiseta de bebé fue la de Boca, siempre me inculcaron acá eso. Después, cuando yo llegué acá a Ecuador, busqué algo parecido a lo que sea Boca y, muy lejos en cuestión de copas internacionales, pero por lo menos en popularidad, Barcelona se acercó un montón a eso, y por ende hubo una conexión", explica.

Pero también hay hinchas argentinos que han hecho de Ecuador su hogar, pero mantienen vivo el sentimiento por el club de sus amores. Tal es el caso de Roberto Gutiérrez, quien migró desde Buenos Aires con destino a Manta en 2010 y hoy, incluso, cuenta con la nacionalidad ecuatoriana.

"Siempre me identifiqué con lo que es Boca, con la garra, la entrega, la popularidad del club, la historia. El mundo Boca es impresionante, una locura, fui a ver todos los partidos que jugó Boca acá, contra Independiente del Valle (2016), Liga (2019) y en 2013 con Barcelona", recuerda.

LOS PLANES PARA ESTE MARTES

Schubert Suing contó que, junto a un grupo de aficionados, realizarán una concentración a las 15:00 en los exteriores del hotel donde concentra el equipo, dirigido por Miguel Ángel Russo, para darle "el último aliento" antes de la salida, con destino al Estadio Monumental.

Luego, el hincha deberá dirigirse también al escenario deportivo, ya que le tocará comentar el juego para Radio Morena. "Inmediatamente a las 4 tengo que ingresar al Monumental, dentro del estadio, intentaré que no me dé un patatús en vivo, pero vamos a ver qué pasa".

Por su parte, Luis Guevara y Roberto Gutiérrez tienen previsto viajar a Guayaquil desde Manta. "Salimos a las 08:00 y el retorno será apenas salga el bus de Boca hasta el estadio, y corre a Manta, y si toca escucharlo en la radio, pues lo haremos, el bus debe salir tipo 16:00 - 16:30 al estadio", explica Guevara.

"Apenas sale el micro (de Boca, con rumbo al Monumental), volver, tratar de llegar al menos para el segundo tiempo. Acá en Manta veremos (dónde mirar el partido), tal vez en la casa de algún amigo, con la 'picadita'", complementa Gutiérrez.