¿Sabías que hacer ejercicios en el agua, a determinada temperatura, estimula los receptores del dolor que están en la piel causando efectos analgésicos y sedantes? Sí, el agua tiene este y muchos otros beneficios que te van a permitir tener, pese a tus dolencias, un mejor estilo de vida.

"Con la terapia acuática (ejercicios dentro del agua) es posible controlar el dolor que provocan enfermedades de tipo geriátrica como la artritis y artrosis; crónicas como la fibromialgia; las que afectan la columna vertebral como el manguito rotador,  síndrome del túnel carpiano y tendintis, o aquellas de los miembros inferiores como la prótesis de cadera, esguinces o desagarros musculares", manifiesta Alex Terán, fisioterapeuta de Aqua Rehabilitate en Quito.

Explica el especialista que el dolor disminuye debido a la temperatura del agua y al contacto de esta con la parte del cuerpo sumergido, lo cual va a estimular los receptores del dolor que se encuentran en la piel causando efectos analgésicos y sedantes.

Además, se va a conseguir una pronta movilidad y mejoría del rango articular porque dentro del agua el peso del cuerpo y la sobrecarga articular disminuyen; mejorar la fuerza muscular debido a la resistencia que ofrece el agua mientras se realizan los movimientos en diferentes direcciones y velocidades. Y una mejoría en la capacidad cardiorrespiratoria permitiendo que aumente la presión sanguínea torácica lo que, combinado con el ejercicio aeróbico, corazón y pulmones aumenten su trabajo.

La temperatura que se utiliza es de 32° C, la cual produce un efecto de vasodilatación superficial y aumento del riego sanguíneo que va a provocar analgesia, efecto antiinflamatorio y relajación. "Tempertauras más bajas producen una vasocontricción la cual nos ayuda en fase agudas de la lesión", dice el fisioterapeuta Alex Terán.

Un tratamiento apto para todas las edades, aunque son los niños y personas de la tercera edad quienes más lo demandan. En niños, las displasias de cadera son los casos de mayor atención.

¿El agua es segura? Responde que es clorada y iozonificada, con análisis de ph y cloro todos los días. "El riesgo de contagio de Covid-19 en agua clorada es nulo", destaca.

Contraindicaciones:

- Procesos infecciosos o febriles, problemas cardiacos o respiratorios, insuficiencia renal, hipertensión gravaes, epilepia famacorresistente, etc.

Las sesiones

Cada sesión dura 50 minutos divididos en 3 fases:

1. Calentamiento. En esta fase se le enseña al paciente ejercicios de estiramientos para que vaya adaptándose al medio acuático.

2- Actividades dirigidas con objetos para ganar fuerza, tono y mejorar rangos articulares.

3. Relajación. El paciente regresa a su estado normal de frecuencia cardiaca