Flores es jurado del reality de Ecuavisa y directora de Las Chicas Dulces.

Lila Flores: “La vida en la madurez me ha dado las oportunidades que quise en la juventud”

Tiene más de dos décadas en la música, la guayaquileña Lila Flores, una de las juezas del reality Ecuador tiene talento, de Ecuavisa, habla para EXPRESIONES sobre su experiencia en ese rol.

Tiene más de dos décadas en la música, la guayaquileña Lila Flores, de 43 años, una de las juezas del reality Ecuador tiene talento, de Ecuavisa, habla para EXPRESIONES sobre su experiencia en ese rol.

Asimismo, conversa sobre la posibilidad que existe que interprete a la villana (La Santanera) en la telenovela inspirada en la vida de Sharon, el relanzamiento de su grupo Las Chicas Dulces (con nueva imagen) y de su show junto a Álvaro Torres y Alejandro Jaén en el Teatro Centro de Arte.

Se aproxima el final de las grabaciones de ETT.

Falta una grabación y luego comenzamos las emisiones en vivo, en noviembre y diciembre.

¿Cómo evalúa esta experiencia?

Yo empecé desde mayo y desde entonces ha sido un carrusel de emociones, es lo más fuerte que he hecho en mi vida. Estoy acostumbrada a vivir el momento, a disfrutarlo si es bueno y aprender si es malo. Sacó de mí no solo mi carácter, además mi experiencia de 27 años en la música. Saqué esa faceta de Lila que la gente no conoce, que solo la conocen mis chicas, las integrantes de mi agrupación. Soy directora y debo ser exigente. En el reality también he tenido que defender mi punto de vista. Nunca me han visto así, pero el programa lo exige.

En las redes sociales se han hecho muchas críticas...

Muchas veces la gente opina en las redes sociales solo para fastidiar. Si digo algo que no les gustó, soy una prepotente, si vestí de tal o cual manera, soy ridícula. No soy la que decide. Detrás está la producción de un canal. No creo que ellos quieran que la jueza de su espacio se vea mal o ridícula. Decidí que a esas personas las voy a bloquear, si hasta con mis amigas soy selectiva. No quiero gente que no aporta o negativa. No me hace falta. Quiero rodearme de positivismo. Las críticas las acepto pero con criterio, no acepto las ofensas, me molesta esa gente con cerebro de maní que solo quiere dañar. En ocasiones me llaman gorda, negra o vieja.

¿Ha sido cuestionada por su vestuario y forma de peinar?

Conmigo quisieron homenajear a la cultura afroecuatoriana. Mi vestuario es muy colorido, con muchas flores. Llevo pañuelos en la cabeza, luzco rizos. No somos blancos, ni chinos. Si se burlan de aquello, se burlan de parte de nuestra cultura. Somos multiculturales. La gente tampoco entiende que cuando se está en pantalla hay que maquillarse de otra manera, con un maquillaje para TV. Hay muchas luces, ahora la imagen de los televisores es más nítida y por ello deben producir muy bien a presentadores o panelistas. Como mi look es muy colorido, mi maquillaje también lo es.

¿Las peleas o diferencias con sus compañeros son reales?

Un programa de TV es un show porque entretiene y la magia no la hago yo, la hace Guadalupe Loor, quien lo edita. A veces me sorprendo cuando veo ETT porque es totalmente diferente a lo que grabé. Mis enojos son reales, cuando algo no me gusta me molesta y lo expongo. Mis diferencias con el otro juez, Martín Guerrero, no son mentira. Él es de otra generación, no le molesta que una niña de 13 años cante un tema con contenido fuerte, en cambio a mí, sí. No me importa que sea anticuada. Lo bueno es que ahí queda esa discusión no se la lleva a lo personal. Son nuestras opiniones y eso se respeta. A diferencia de otros jurados, no vamos a llegar ni a las manos ni a los insultos.

A pesar de las críticas usted fue la única de los jueces que desde un principio la prensa y gran parte del público aceptó por su experiencia.

Ha sido algo hermoso porque es como un premio por todo el tiempo que he luchado y he trabajado. No es por mi cara bonita que estoy ahí. Es por mi trayectoria, por lo que sembré en cada presentación, en cada escenario. El grupo tiene 22 años y aproximadamente tengo 14 a cargo de Las Chicas Dulces.

Proviene de una familia de artistas, ¿ellos son sus primeros fans?

Mi padre, Daniel Flores, y mis hermanas, Maggie y Daniela, todos artistas, están orgullosos de mí. Toda mi familia y la del padre de mi hija (Alexa Isabela, 1 año y medio) sienten que no los he defraudado. Dicen que yo le pongo mucha alegría, ellos saben que así soy. Gracias a Dios no han tratado de cambiarme, tengo libertad.

¿Volvería a repetir su rol de jueza?

Por supuesto. Pero eso no lo sé, aún no nos han dicho nada. La TV es un mundo incierto. Por estrategia creo que deberíamos seguir los cuatro jueces porque ya empezamos un camino y para que algo funcione, hay que mantenerlo. Es mi humilde opinión. Tengo mi conciencia tranquila porque he dado lo mejor.

Usted es muy conocida, pero el pantallazo le ha aumentado la popularidad.

Este mes, en Huaquillas, Las Chicas Dulces ofrecimos un show y el público se subió al escenario. Me asusté porque estaban en el lugar muchos niños. Después de mí, a mi hermana Daniela la persiguen. Arrastro a mis chicas. La popularidad aumenta.

¿Y los contratos aumentaron?

En eso estamos. Llaman mucho, pero a veces esas negociaciones no se concretan. Existe mucha competencia y algunos grupos han bajado los precios, de tal manera que han dañado el mercado.

El miércoles 18 de este mes, Lila Flores relanzará la agrupación Las Chicas Dulces y presentará su nueva canción, el reguetón ¿Quién dijo miedo?, mezclado en Estados Unidos y compuesto por Robbie Novoa.

¿Está planificando un retiro del grupo?

No inmediatamente, pero sí después de tres o cuatro años. Quiero que las chicas tomen la batuta musical, no puedo seguir siendo eternamente una chica dulce. El tiempo pasa. El grupo demanda mucha energía. Continuaré como la directora y la dueña. Daniela Flores, la actual líder, Tatiana Pisco y Sofía Sánchez cantan casi todo el tema, yo participo poco. He hecho un cambio completo. El vestuario es de la diseñadora Francesca. Busco una nueva integrante, el principal requisito es que sea disc-jockey, mejor si canta. Nuestras mezclas son en vivo, me interesa que esa persona esté en el escenario, no escondida. Estoy haciendo una audición.

¿Dejará de cantar?

Aspiro a seguir cantando en solitario, tal vez otro tipo de géneros.

Usted es uno de los talentos que aspiran a ser parte de la telenovela sobre la vida de Sharon.

Uno de mis sueños es actuar. Hice el casting para el personaje La Santanera, la villana de la historia. Ella es una estrella musical que está en lo más alto de su carrera cuando surge Sharon. Cuando la popularidad de una sube, la de la otra baja. Ahí se da una gran rivalidad. Me encantaría hacer ese papel. Es una mujer ambiciosa, mala, agresiva, nada que ver conmigo. Siempre he querido participar en un drama porque es un reto. Esta puede ser la oportunidad. Estoy viviendo una buena etapa profesional, la vida en la madurez me ha dado las oportunidades que quise en la juventud. Las aprovecharé.

Lila compartirá escenario con el cantante salvadoreño Álvaro Torres, el 19 de este mes en el Teatro Centro de Arte. Con él cantará dos o tres temas. Buenos amigos, que interpretó con Selena, y Mi amor por ti (con Maricela). También es probable que se incluya Estaremos juntos.