El año pasado, el equipo periodístico de El Comercio, integrado por Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra, asesinado en la frontera norte.

Un homenaje ‘a pie’ para el equipo periodistico de El Comercio

Al Sigifredo Hildalgo le tomó 12 días llegar a Ecuador desde Antioquia, en Colombia. El pintor arribó a la capital con un regalo: un retrato de Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra.

Sigifredo Hidalgo tardó 12 días en llegar a Ecuador desde Antioquia, en Colombia: caminó, pidió aventones y tomó unos cuantos buses. Todo con un propósito en mente: entregar un regalo a los allegados del equipo periodístico de El Comercio.

Finalmente, el pasado 20 de marzo, arribó a Quito con un retrato en el que plasmó a Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra, trabajadores del rotativo capitalino asesinados en la frontera norte, en 2018.

El artista, de 63 años, comentó a Diario Expreso que demoró seis meses en terminar el cuadro, que mide dos metros y que fue pintado con óleo. “Me sentí identificado porque en Colombia yo también viví la guerra. También perdí seres queridos. Entonces sentí mucho dolor con lo que pasó en Ecuador”, explicó.

Hidalgo entregó su homenaje durante la vigilia que colegas y familiares organizaron la noche del miércoles, al cumplirse un año del secuestro. Allí, el pintor dirigió unas palabras al público y develó su pieza, en la que se aprecian unas manos elevadas hacia el cielo y los rostros de Rivas, Ortega y Segarra.

“Nadie me contactó. Decidí venir por mis propios medios”, aseguró. Sus ocho días en la capital —dice Hidalgo— han sido gratos, dado que los allegados a los fallecidos se han mostrado muy agradecidos con él.

El hombre no tiene familia en el país, por lo que se hospeda en diferentes hostales: lo que su situación económica le permite costear. Sus ojos verdes se llenan de lágrimas cuando habla de la guerra que ha azotado a Colombia y de lo sucedido con el equipo periodístico.

El gesto de Hidalgo es una costumbre que empezó desde hace algún tiempo. A finales de 2016, el pintor hizo un recorrido similar rumbo a Brasil para rendir homenaje a los futbolistas del club Chapecoense, fallecidos en un accidente aéreo.

Entonces, se tardó 60 días en llegar. Y, en una de las reuniones que se mantuvieron para recordar a las víctimas, el colombiano develó una pieza que retrataba a los deportistas y al resto de personas que perdieron la vida en el vuelo.