Contraste. Los jugadores de Emelec celebran el segundo tanto anotado por Cristian Guanca, ayer en el estadio Capwell. El Bombillo no depende solo de sus resultados, pero sigue sumando puntos soñando en una posible final.

Emelec lucha hasta el final

Ganar la etapa y forzar a dos finales en las que pueda defender su corona es prácticamente una utopía para Emelec, pero el equipo sigue jugando de la forma en que desea su entrenador, como un auténtico tricampeón. Ayer los dirigidos por Alfredo Arias golearon 3-0 a Liga de Quito, en partido disputado en el estadio George Capwell.

Asegurando la posesión de esférico, rotándolo constantemente hasta encontrar los espacios necesarios para causar daño y siendo efectivo al momento de concretar, el Bombillo sumó tres puntos que acortan la diferencia con Barcelona y le permiten extender el drama de la definición del certamen, aunque el Ídolo tiene todas las de ganar.

El triunfo de ayer resultó laborioso. Emelec lució muy superior a su rival, pero tuvo algunos problemas para romper el cerco defensivo planteado por Álex Aguinaga, quien salió expulsado por reclamos al juez central. Posteriormente el técnico explicaría que no quedó conforme con la actuación del árbitro José Zambrano, especialmente en la jugada que desembocó en el primer gol azul, por una falta de Fernando Guerrero sobre Fernando Giménez; a criterio del ‘Güero’, el penalti que ejecutó Cristian Guanca no existió.

“Con ese gol de penalti inexistente, te condiciona y es más complicado. Hay momentos en los que colabora alguien externo para que resultados así sucedan”, dijo Aguinaga.

Más allá del criterio del estratega ecuatoriano, en la cancha Emelec justificó su triunfo, practicando un fútbol ofensivo, proponiendo juego de tres cuartos de cancha hacia adelante y controlando las escasas insinuaciones ofensivas de los universitarios.

Un remate de Anderson Julio, que salió por encima del horizontal, cuando el delantero estaba solo frente al guardameta Esteban Dreer, fue la única insinuación ofensiva de una Liga que pensó más en defender su portería, aunque llegó a Guayaquil con la necesidad de buscar los puntos que lo acerquen a la repesca de la Copa Libertadores de América.

Incluso cuando se vio en desventaja la visita no salió de su reducto, pero Emelec tuvo la paciencia para encontrar el momento justo y dar el zarpazo.

Fue a la salida de un tiro libre mal ejecutado por José Francisco Cevallos, donde los ‘millonarios’ pudieron ampliar la diferencia. Guanca culminó bien una acción de tres toques, iniciada por Carlos Moreno y que Fernando Gaibor trasladó hasta la zurda del goleador.

En una nueva falta penalti, esta vez del arquero Daniel Viteri sobre Bryan Angulo, Fernando Giménez sentenció el 3-0 definitivo.

El miércoles Emelec intentará vencer a Deportivo Cuenca, esperando algún resbalón de Barcelona ante Independiente, para seguir manteniendo la esperanza de ganar la etapa. MGD