El presidente de la empresa Sertecpet explica a EXPRESO cómo se desarrolló la patente, que ya está registrada en Estados Unidos, para crear una bomba de extracción de crudo que ahorra costos a las compañías petroleras.

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El presidente de la empresa Sertecpet explica a EXPRESO cómo se desarrolló la patente, que ya está registrada en Estados Unidos, para crear una bomba de extracción de crudo que ahorra costos a las compañías petroleras.

¿Cuál es la diferencia entre las bombas para extraer petróleo que hay en el mercado y la que han creado?

Es un aparato inteligente que tienes tres funciones fundamentales. La primera es que permite producir y hacer pruebas en el pozo. La segunda, tiene la válvula de cierre que permite cerrar el pozo y tomar la temperatura. Esa es la diferencia. La herramienta pasó por un arduo proceso en los países donde solicitamos la patente. EE. UU. al no encontrar algo parecido, para obtener la patente tenía que cumplir con tres requisitos de innovación.

¿Cuánto demoró entonces todo el proceso?

Unos cinco años. Se debía probar que es algo único, útil para la industria y que se podía producir para atender los pedidos del mercado. Las investigaciones y los exámenes fueron muy rigurosos. Existen muchas bombas de diferentes aplicaciones.

¿Es útil también para el país?

Lo más importante es que Ecuador está demostrando desde el lado de la investigación que hay científicos ecuatorianos, que somos capaces de innovar y de desarrollar tecnología de punta. En un mercado como el de EE. UU., que es competitivo en el área petrolera, que se supone que es la meca de la industria del petróleo, nosotros los ecuatorianos hemos sido capaces de desarrollar una herramienta con tecnología así.

¿Pero cuál es el beneficio?

Es que abarata, para el cliente, el costo de la extracción del petróleo, de manera significativa. Es porque tiene tres funciones en una misma herramienta. Además permite incrementar la producción.

¿En qué porcentaje se bajan los costos de producción?

Cada pozo, cada yacimiento, es como un marcapasos, único para el paciente. Entonces baja muy significativamente.

¿Cuánto?

Dependiendo del volumen podemos trabajar por debajo de los cinco dólares. La herramienta permite eficiencia en la producción y así se ahorran miles de millones de dólares. Si hubiera un inconveniente, en horas se puede solucionar. No es necesario parar días o cambiar una tubería si hay un inconveniente en el pozo.

¿Ya se está exportando?

Sí, estamos introduciendo la marca Ecuador con un producto que no es banano, camarón o cacao. Hemos logrado subir la bandera del país en el mundo tecnológico.

¿Son ustedes la excepción?

Lo que pasa es que no es fácil. Es un proceso que demanda recursos económicos. Aquí invertimos más de 14 millones de dólares en cinco años. Es una iniciativa propia de la empresa, la cual nació en 1990. Es un ejemplo para lo poco que ha habido en el país porque es la primera patente de EE. UU. de un producto ecuatoriano. Ya es un referente.