
Cien nuevos despidos en la clinica Panamericana
Los despidos masivos continúan en la clínica Panamericana. Ayer un centenar de empleados fueron impedidos de ingresar a sus puestos de trabajo, con lo cual sumarían, a decir de los afectados, 275 cesados en menos de 75 horas.
Los directivos habrían tomado esta medida por supuestos pagos pendientes por parte del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y del Ministerio de Salud Pública (MSP), que superan los 10 millones de dólares, indicó Publio Vargas Andrade, accionista de la Panamericana, ubicada en las calles Panamá y Luis Urdaneta.
“¿Cómo pagar los sueldos si no existe dinero?”, se preguntó el directivo. Vargas aseguró que si el Gobierno cancela la deuda, los empleados podrán regresar a laborar inmediatamente.
Mientras tanto, en los exteriores de la clínica, más trabajadores se sumaron ayer a la protesta obrera que empezó el pasado sábado, tras el despido de 175 empleados, entre médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería y personal administrativo de la mencionada casa de salud.
Mercedes acudió ayer a laborar como de costumbre, a las 08:00, y en la puerta de ingreso el guardia de la institución le dio la noticia de su salida. Lo mismo ocurrió con un centenar de personas, indicó Amanda Avilés, una de las cesadas.
Ante esta situación, ayer nuevamente, los afectados protestaron a las afueras del centro médico en espera de alguna respuesta favorable; pero “nadie nos da cara, solo el guardia nos informó que no podemos ingresar”, comentó una de las afectadas que prefirió no identificarse.
Hasta el mediodía, decenas de personas esperaban en los exteriores de la clínica y ni la garúa los hizo desistir de su protesta, la cual estuvo vigilada por personal policial.
Los despedidos indicaron que solo 14 personas serían las que continúan laborando y la mayoría son mujeres embarazadas o con permiso de maternidad. Los representantes de la clínica, en cambio, informaron que el 50 % de la plantilla de trabajadores fue cesado.
Los exempleados conocían de la mala situación económica de la entidad, pues les adeudan el decimotercer sueldo y los meses de enero y febrero. Igualmente denunciaron, con documentos personales, que la clínica no ha cancelado las aportaciones al IESS desde noviembre. Sin embargo, esos montos fueron descontados de sus roles de pago.
Los trabajadores, personal médico en su mayoría que ha laborado entre cuatro y 20 años, aseguran que continuarán exigiendo sus derechos, porque “hemos sido despedidos intempestivamente, no hemos renunciado”, apuntó la enfermera Yahaira Franco.
Los directivos de la Panamericana plantean la compra de las renuncias como medida de solución, pero los empleados no están conformes con los montos establecidos y desconfían de la capacidad de pago de la clínica. Por ello llevaron el caso al Ministerio de Relaciones Laborales, entidad que hasta el cierre de esta edición no se pronunció al respecto, al igual que el Ministerio de Salud.