
Ascensor chino al planeta futbol
En el 2010, el fútbol chino se debatía en un nivel de juego mediocre, que además estaba salpicado por escándalos de corrupción, como el anuncio de las contrataciones de Nicolás Anelka y Didier Drogba, quienes no recibieron las cantidades ofrecidas. Hoy la realidad es muy diferente, gracias a las millonarias inversiones de las multinacionales que ven en China una vitrina similar a la que Estados Unidos elaboró en la MLS. La diferencia es que el gigante asiático no busca jugadores que estén en el ocaso de su carrera, sino a figuras que pongan a su superliga en un sitial de privilegio. La segunda potencia económica del mundo ocupa el casillero 93 en el ranking de la FIFA. Gigantes empresariales de sectores muy diferentes, como el del comercio electrónico Alibaba, la cadena de productos electrónicos Suning o el conglomerado Wanda, con sus empresas que oscilan desde la construcción al cine, han decidido invertir en fútbol. Se suma a ello el espectacular contrato de derechos televisivos de la Liga firmado esta temporada por China Media Capital, por valor de 1,287 millones de dólares para 5 años y que ha multiplicado por 32 el monto previo. Nombres como los de: Alex Teixeira, Jackson Martínez, Fredy Guarín, Gervinho y Ramires ya forman parte de los principales clubes de ese país. Sus fichajes implicaron un desembolso de 301 millones de dólares y están reservados otros tantos para invertirlos antes del 26 de febrero, fecha en la que se cierra el mercado de pases. Al pastel también quieren sumarse los europeos. El Real Madrid cuenta con oficinas abiertas en Pekín, y el Barcelona y el Manchester United en Hong Kong. El Manchester City y el Bayern Munich, entre otros, también tienen planes de iniciar actividad formal en la nueva meca del fútbol. MGD