¿Cómo operaba la red que distribuía licor adulterado en Quito?

Una operación policial ejecutada en el Distrito Metropolitano de Quito dejó como resultado la desarticulación de una organización dedicada a la producción y distribución de licor adulterado. El operativo se desarrolló en los sectores de Quitumbe, Eloy Alfaro y Manuela Sáenz, al sur y centro de la capital ecuatoriana.

Durante el procedimiento, las autoridades allanaron ocho inmuebles presuntamente utilizados como centros de acopio, fabricación y logística de productos ilegales. En estos lugares se encontraron evidencias que apuntan a un sistema estructurado de falsificación y comercialización.

Seis detenidos y bienes incautados

Seis personas fueron detenidas, entre ellas ciudadanos ecuatorianos y venezolanos. La policía los vincula con los delitos de asociación ilícita, falsificación de documentos y atentado contra la salud pública, debido a la naturaleza del licor incautado.

Además, se decomisaron seis vehículos que presuntamente servían para el transporte de la mercadería, así como seis terminales móviles utilizados para coordinar las operaciones delictivas.

Mercancía adulterada: riesgos para la salud

Entre los productos incautados se cuentan 500 botellas de licor adulterado, 1.000 litros de licor artesanal sin registro sanitario y miles de insumos para su distribución: 5.000 etiquetas de licor, 5.000 timbres fiscales falsificados, 3.000 códigos QR, 5.000 tapas y 5.000 botellas vacías recicladas.

Según especialistas en salud pública, el consumo de licor adulterado puede provocar intoxicaciones graves, pérdida de la visión, daños hepáticos e incluso la muerte, debido a la presencia de metanol u otras sustancias no aptas para el consumo humano.

Impacto económico: evasión tributaria y crimen organizado

La afectación tributaria estimada por la comercialización de esta mercancía ilegal supera los $100.000 dólares. Además, se calcula que el valor de los productos incautados habría generado cerca de $500.000 en ingresos para el mercado negro.

Este tipo de delitos no solo comprometen la salud de los consumidores, sino que también generan una competencia desleal con el comercio legal y representan una fuente de ingresos para redes del crimen organizado.

El auge del licor ilegal en Ecuador

El mercado de licor adulterado ha crecido en los últimos años en Ecuador, especialmente tras la pandemia, cuando la crisis económica impulsó la producción y venta de bebidas ilegales a menor costo. Quito, Guayaquil y otras grandes ciudades han sido escenarios de operativos similares.

En 2023, el Servicio Nacional de Aduanas decomisó más de 200.000 productos de contrabando, entre ellos bebidas alcohólicas falsificadas. Las autoridades advierten que este tipo de delitos se ha vuelto más sofisticado, con el uso de etiquetas, códigos y timbres falsos que imitan a los originales.