Editoriales

Elusión con ratificación

Pasados 100 días con esa sospecha, ya es certeza que si no hay cambios, seguirán siendo pocos los que paguen impuestos y muchos los que crean más listos que el resto

Si lo que hacen falta son ingresos para el Estado y si se sabe que la base de contribuyentes tiene un subregistro sobre los ecuatorianos que deberían estar pagando impuestos, no tiene sentido mantener la misma estrategia en el Servicio de Rentas Internas.

Por años, tantos que superan la década, el ente que recauda y que, en teoría -solo en teoría-, controla y sanciona el incumplimiento de contribución al Fisco, ha estado ciego ante casos evidentes como políticos que donan su sueldo y viven en mansiones, como empresarios que declaran minucias pero tienen negocios exitosos, como entidades que gastan y gastan pero no mejoran el servicio público que prestan. Los ejemplos son incontables y solo sirven en este texto para ir al punto:que el Servicio de Rentas Internas no controla o no sabe hacerlo bien. Por eso, son pocos los que pagan impuestos, muchos los que eluden, algunos los que evaden y demasiados los montos que entregan a las arcas los que sí cumplen con el Estado. Con esta radiografía, alimentada por evidencias y denuncias recopiladas en el tiempo, no hay sentido común en ratificar en su cargo a quien no hizo nada en el pasado. Pasados 100 días con esa sospecha, ya es certeza que si no hay cambios, seguirán siendo pocos los que paguen impuestos y muchos los que crean más listos que el resto.