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La “nueva” súper

Avatar del Fausto Ortiz

Esto que está ocurriendo con la gasolina regular, podría replicarse en el diésel para aquellos usuarios que estarán dispuestos a pagar un poco más de precio, por una calidad superior, e incluso en el gas si se lograse identificar una adecuada relación entre precio y tamaño popular de cilindro o bombona’.

El precio promedio del petróleo (WTI) en el primer semestre de 2022 fue de USD 101,6 y un nivel similar se obtuvo en 2014 cuando registró USD 100,9 para igual período. En esos 8 años la historia de la importación y pérdida al vender localmente el gas, diésel y naftas ha sido muy diferente. El volumen importado de Gas aumentó 35%, Nafta para “hacer” gasolinas apenas 2,5 % y Diésel 11 % en esos 8 años. Comercializar combustibles importados ha representado una pérdida de USD 1.612 millones en estos 6 primeros meses del 2022, USD 901M en diésel, USD 378M en naftas y USD 333M en gas. Ahora se pierde 14 % menos en Diésel y 43 % menos al comercializar la Nafta importada, mientras que Gas aumentó su pérdida en 13 % del 2014 a 2022 comparando primeros semestres.

En todo 2022 el subsidio superará los USD 4.000 millones al sumar los USD 3.000M esperados por comercializar combustibles importados más el costo de oportunidad al vender lo refinado localmente por debajo del precio internacional.

El incremento gradual de precios en diésel y gasolinas sirvió para ir achicando el tamaño de sus subsidios. A la vuelta de pocos años regresaremos a la vieja historia de que el mayor subsidio de combustibles ocurre en el gas y al ritmo actual seguramente no tendremos alternativas de solución para analizar.

A estas alturas seguramente ya habremos “tanqueado” con la nueva eco plus de 89 octanos para mejorar nuestra extra o aliviar el bolsillo ante el precio de la súper. El ingreso de esta nueva gasolina en el mercado afectará el consumo de la súper, que de siete años a la fecha ha caído desde 223 millones de galones en 2015 a 105 millones de galones en 2021, y seguramente a menos de 80 millones de galones en 2022 (en primer semestre se consumieron 41 millones de galones de súper a nivel nacional).

El actual consumo de la extra (y eco) es de 90 millones de galones mensuales. Para el fisco será interesante que una parte del parque automotor migre de la gasolina subsidiada a la nueva eco plus de 89 octanos, no tanto para achicar el subsidio, sino por la oportunidad de ofertar combustible de una mejor calidad a un mayor precio, sin retirar la posibilidad de tener acceso a otro similar, pero subsidiado. Esto que está ocurriendo con la gasolina regular podría replicarse en el diésel para aquellos usuarios que estarán dispuestos a pagar un poco más de precio por una calidad superior, e incluso en el gas si se lograse identificar una adecuada relación entre precio y tamaño popular de cilindro o bombona, como paso previo a procesos de focalización de combustibles que no encuentran fórmulas mágicas.

Es muy probable que esta eco plus 89, se convierta en la “nueva” súper al encontrarse en el punto medio de las 2 que consumimos en la actualidad, y ayudará con mayor velocidad a disminuir el tamaño del subsidio de los combustibles para que dichos recursos encuentren un mejor fin, diferente al actual, que es dirigirse a quien no lo necesita.

Corrigiendo el tema de los subsidios, nos mantenemos a la espera de conocer algún plan para poder incrementar la producción petrolera y aprovechar los precios, que al mismo tiempo permitirá reducir el tamaño del déficit fiscal, la necesidad de financiamiento y el costo del mismo. Ya vamos como tarde.