Cartas de lectores | Mandato claro y firme y del pueblo ecuatoriano

El Gobierno debe abrirse al diálogo y cambiar su política

Los resultados del Referéndum y Consulta Popular 2025 expresan un mandato claro del pueblo ecuatoriano que obliga al gobierno de Noboa a rectificar su política, abandonar el autoritarismo y rechazar tendencias fascistas del régimen. Este momento demanda reflexión y autocrítica de todos los sectores sociales y políticos, sin arrogancia ni repetición de errores.

El triunfo es cívico y democrático, no un botín para políticos oportunistas vinculados a la corrupción. Representa una reacción ciudadana frente a la política elitista e injusta del Gobierno. Destaca especialmente el rechazo a la política minera que amenaza agua, páramos y ecosistemas; los resultados muestran un ‘cabildazo del agua’ a nivel nacional.

El Gobierno debe abrirse al diálogo y cambiar su política. Entre las medidas urgentes: respetar la Constitución y restablecer la institucionalidad democrática; archivar procesos penales contra líderes sociales; y garantizar una justicia independiente. Las instituciones de control deben retomar su rol conforme a la ley.

Se debe poner fin a la minería en ecosistemas frágiles, cumplir con consultas populares anteriores y respetar territorios indígenas y campesinos. Es necesario reactivar la economía apoyando a micro, pequeños y medianos productores, fortalecer la agricultura familiar y proteger la soberanía alimentaria.

También se requiere mejorar salud, educación y vialidad, atender equitativamente los territorios y abandonar el centralismo. El Estado debe cumplir con el IESS y promover reformas mediante consensos amplios.

Frente a la delincuencia organizada, se necesitan políticas más allá de lo policial y militar, así como un diálogo nacional y un sistema anticorrupción eficaz. Los partidos deben hacer una profunda autocrítica y avanzar hacia reformas democráticas producto de consensos amplios.

El Gobierno debe aprender de esta derrota, renovar su gabinete, rodearse de técnicos honestos y transparentar la corrupción en el sector energético. Si no rectifica, el descontento social aumentará.

Carlos Castro Riera