La inversión extranjera para la recuperación económica

Perú y Chile son economías estables. Sus respectivos capitales deben emigrar por la conducta de sus actuales gobiernos, que amenazan sus legítimos derechos a trabajar, producir y recibir los beneficios. Sin perder de vista lo que pueda suceder en Brasil y Colombia, Ecuador se convertiría en el único beneficiario y brazos que sostendrían esos capitales. Son fondos e inversiones cuyo propósito es tener una participación a largo plazo en geofísica, metalmecánica, softwares, geotecnia, etc.; no son capitales golondrinas. Nuestro país tiene que trabajar muy seriamente adecuando leyes, contabilidades, trámites burocráticos a la realidad de nuestra época; quieran o no es la globalización. Según sondeos se trataría por parte de Perú de unos 20 mil millones de dólares y otros tantos de Chile. Como vemos, no es juego de canicas, tenemos la responsabilidad de responder a este reto que se nos ha puesto y hacer lo que han hecho otros países, permitir sin egoísmo, sin prejuicio y sabiduría lo mejor para los ciudadanos de esta patria. También es verdad que esos dineros podrían viajar a Centroamérica, como Costa Rica, República Dominicana, pero por la cercanía y de las conversaciones que se ha tenido, somos nosotros los que albergaríamos esas industrias. No se trata de instalar almacenes para vender la mercadería que ellos producen, se trata de instalarse y comprar tierras, entregar trabajo a ecuatorianos y generar impuestos. Necesitamos urgentemente reformar leyes laborales, modernizar el sistema societario, adecuar en forma importante el sistema de salud, la seguridad ciudadana y de propiedad. No podemos desaprovechar esta oportunidad

Franklin Lituma Manzo